Sospechoso hermetismo es lo que Laura Beristain y su cabildo en Solidaridad han manejado en torno a la propuesta de incrementar dentro del presupuesto de egresos para el 2020 la cantidad de 50 millones de pesos más al DIF municipal, para programas y apoyos, que el gobierno municipal estaría, según ha trascendido, utilizando más bien con fines electorales.
Este viernes que se llevaría a cabo la sesión de cabildo donde se votará este propuesta, además de la de aumentar el presupuesto también a Desarrollo social, el gobierno municipal no hizo pública la hora en que se llevaría a cabo, ni tampoco el lugar, lo que habla de la falta de transparencia con que se está manejando este tema, aunque trascendió que la sesión podría transcurrir alrededor de las tres de la tarde en el nuevo Palacio Municipal.
De aprobarse fast track, luego de un sospechoso precabildeo, donde se presumen negociaciones debajo de la mesa, en lo oscurito, se estarían sacrificando los rubros de obra pública y seguridad pública, ambos sumamente necesarios dado el exponencial desarrollo que presenta el octavo municipio de Quintana Roo, que rebasa por mucho la obra pública que se requiere para satisfacer las necesidades de la población por un lado y por el otro por la imparable ola de violencia que se ha duplicado en esta administración laurista, que tan solo este 2019 ha dejado hasta el momento una espiral de 194 ejecuciones, la gran mayoría de ellas sin personas detenidas, esto sin contar el incremento de delitos como las violaciones y feminicidios, así como delitos de bajo impacto como el robo a casa habitación, el robo a negocios, a cualquier hora en cualquier zona de la ciudad.
