Madre regiomontana teme por la integridad física de su hija de dos años, y hace lo imposible para recuperarla; el padre cancunense le jugó una mala pasada al traer a la menor a Quintana Roo con la excusa de vacacionar dos semanas.
Estefanía Sarahí Cazares, convencida por el abuelo paterno Arturo Aranda Amaro, accedió a que sus dos hijos realizaran un viaje de vacaciones por dos semanas a este destino turístico; el pasado 1 de julio del año en curso, Gerardo Aranda Ruiz, padre de la menor arribó a Cancún con los niños de 6 y 2 años.
La madre de familia afectada relató para Denuncia Ciudadana, que hace cuatro años llegó a Cancún para trabajar; por esas fechas conoció a Gerardo Aranda Ruiz y luego de un tiempo de vivir juntos se embarazó y al nacer la menor Betzari, descubrió una infidelidad.
Gerardo Aranda Ruiz
“Cuando me enteré de todo, Gerardo me corrió de la casa y como aquí en Cancún no tengo familia me regresé a Monterey, Nuevo León. Él se desentendió de su hija, pero el abuelo Arturo Aranda Amaro siempre estuvo pendiente”, indicó.
Relató que Arturo Aranda en reiteradas ocasiones le pedía ver a su nieta y al ser tanta la insistencia accedió a que los niños viajaran, motivo por el que Gerardo Aranda fue en busca de los menores hasta Monterrey.
“Mediamos en que serían dos semanas de vacaciones, pero en la primera semana cuando hablé con mi hijo de 6 años me relató que le pegaban; eso me alarmó demasiado”, refirió Estefanía.
La joven madre arribó a Cancún el pasado 18 de julio y al no tener respuesta de Gerardo y los abuelos, acudió el sábado 20 de julio la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (FGE) para levantar una denuncia por sustracción de menores, en la que se abrió la carpeta de investigación FGE/QR/CAN/UAT/07/8456/2019, con número de caso FGE/QR/BJ/07/14923/2019 en la Unidad de Atención Temprana.
“El lunes 22 de julio acudí con unos policías al domicilio de los abuelos en el fraccionamiento Gastronómicos, en la Supermanzana 77, manzana 51, Lote 15, edificio 235, departamento 101, pero ese día sólo pude recuperar a mi niño de 6 años, porque Gerardo no es su papá, pero a la niña de 2 años no me la entregó y desde entonces he dado vueltas con las autoridades para que se solucione pronto esta situación”.
Estefanía dio a conocer que las autoridades sólo le han dado largas y sólo le explican que Gerardo también tiene derechos como padre, y que tendría que esperar un juicio de tutela de menores para poder recuperar a su hija.
Sin embargo, ella teme por la integridad de su pequeña, pues vecinos del domicilio de los abuelos paternos le han comentado que la maltratan.
Demanda por sustracción de menores en Cancún
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