El ingenio y la creatividad se manifiesta nuevamente en el caso de la joven Victoria Abril Curiel Morfín, quien junto con su madre Adriana Morfín, buscó y encontró en la producción de libretas y diversos productos otra forma de aprovechar la gran cantidad de sargazo que recala en la costa quintanarroense, con lo que se suma a otras personas que lo utilizan para fabricar bloques para la construcción y zapatos, entre otros productos.
La joven emprendedora explicó que desde pequeña su madre y su abuela le inculcaron el cuidado del ambiente, de los animales.
El año pasado, al finalizar el ciclo escolar, vi una caja llena de libretas y libros. Con ayuda de mi mamá empezamos a hacer libretas con material reciclado. Por esos días fuimos a la playa, vimos el sargazo y pensamos en qué se podría utilizar, añade.
Experimentamos mucho, tuvimos muchos tropiezos porque la materia prima se descompone rápidamente, pero al final obtuvimos papel que se puede usar no sólo en libretas, sino también para pintar acuarelas y óleos.
Hoy está asociada con una empresa regiomontana dedicada a la impresión, creo Sargánico, una empresa formal que encontró otros usos: en portavasos, portamenús, folders, etc.
Elaboramos productos sustentables a base de sargazo con el fin de contribuir a resolver la problemática ecológica de nuestro destino turístico, con productos de calidad destinados para el mercado nacional e internacional, apunta.
Ya empezamos el proceso para obtener la patente y ya tenemos la marca registrada. Cada tres días estamos procesando unos 250 kilos de sargazo de los que salen de mil a mil 500 pliegos. Fue emocionante obtener papel, pero más aún cuando vimos la aceptación que tiene.
Para estar cerca de la empresa Victoria, quien está orgullosa de haber encontrado uso para la plaga, se mudó a Cozumel a Cancún junto con su madre.
Las libretas se pueden comprar por medio de la página de Sargánico en Facebook, www.facebook.com/sarganico/ y próximamente en su sitio web www.sarganico.mx.
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