Decenas de disparos en la fachada de un edificio, sangre en las escaleras y el miedo que recorre a los vecinos que habitan el fraccionamiento Paseos del Mar, es lo que quedó tras el enfrentamiento entre agentes del Grupo Antisecuestro de la Fiscalía General del Estado (FGE) y jóvenes plagiarios que mantenían secuestrada a la joven Valeria Sofía Gamboa Enríquez.
Un verdadero panorama de incertidumbre es lo que viven los vecinos de la Región 251, fraccionamiento Paseos del Mar, pues curiosos se acercan al edificio F, manzana 93, lote 2, para observar los departamentos 303 y 304, los cuales permanecen cerrados con cadenas y tras la ya reconocida cinta amarilla con la leyenda de prohibido el paso.
En la fachada queda marcado un disparo señalado con el indicio B, en las escaleras quedaron las manchas de sangre que caen escalón por escalón, lo que los lleva a pensar de quien será, ¿de la joven que estuvo tres días privada de su libertad, en peligro, en ese lugar sin que se dieran cuenta o de los secuestrados que fueron sometidos a balazos por parte de la policía?
“Desde las siete de la noche llegaron los ministeriales, yo los vi, no tenían armas largas, pero los reconocí por las mariconeras y la pinta de judiciales, a uno si le vi la pistola”, comenta uno de los vecinos que seguía impresionado por la gran cantidad de disparos que escuchó, los cuales describe como petardos que de forma constante retumban las ventanas de los domicilios cercanos.
Otro aseguraba que hace 15 días esos sujetos fueron detenidos por la Policía Municipal, “eran chavitos chemos, si los conocíamos, se los llevaron porque estaban tomando y fumando mota afuera del departamento. Yo creo que sí eran peligrosos, porque hasta una señora había ahí que se veía muy mala, me imagino que ella la cuidaba, era muy grosera y se la pasaba caminando aquí abajo”.
Mientras las versiones surgen, la Fiscalía General del Estado (FGE) permanece en silencio, se dice que, por la secrecía del caso, para no entorpecer la investigación, pero se olvida de felicitar a los seis agentes del Grupo Antisecuestros que sin gasolina y con lo poco que tenían, resolvieron el caso y tuvieron el apoyo del Ejército y la Marina Armada de México.
Se sabe que dos de los delincuentes permanecen hospitalizados, uno de ellos con rozones de bala y el otro con fractura en tibia, quien tendrá que pasar su proceso legal internado hasta que pueda ser llevado antes las autoridades correspondientes, mientras que la joven, recibía atención médica para salvar su dedo meñique, el cual sería entregado a sus familiares como muestra de vida.
Los detenidos son: O. G. L. de 17 años, operador de maquinaria pesada, originario de Cancún; M.A.C.P. de 18 años, tablaroquero de Tabasco; J.R.H. de 18 años de Villahermosa, Tabasco y E.C.P. de 22 años de Cárdenas, Tabasco, jóvenes adictos que pasaron de ser simples delincuentes a peligrosos secuestradores.
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