La Ciudad de la Alegría necesita diversificar sus canales de generación de ingresos y que la ayuda no sólo provenga de fundaciones y empresas, sino que todos cooperen con su grano de arena para poder llevar ayuda a más personas, afirmó Julián Balbuena Alonso, director general de Best Day.
En el marco de la presentación del informe labores de la Fundación Ciudad de la Alegría, indicó que en el último año se llevó apoyo a 48 mil personas, una mínima parte de las que requieren ayuda, pues según cifras de la Coneval, el 30 por ciento de la población de Cancún se ubica por debajo de la línea de pobreza, es decir, unas 230 mil personas.
Ojalá les resolviéramos la vida, pero sólo los atendimos en una consulta médica, les brindamos apoyo en el aspecto alimentario, les ayudamos con información y temas jurídicos, nada que resuelva su vida.
Lo que hay que hacer es instituir la ayuda porque lo que hacemos es como ponerle una gota de agua al mar. Sin embargo, como decía la Madre Teresa, el mar no sería el mismo sin esa gota, aseguró.
Balbuena Alonso rechazó que no haya confianza y, en ese sentido, recordó el reconocimiento que la Ciudad de la Alegría recibió del Centro Mexicano de Filantropía (Cemefi), que certifica la transparencia, profesionalismo y gestión de las instituciones filantrópicas.
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Julián Balbuena Alonso, director general de Best Day afirmó que necesitan más donaciones
La manera como la ayuda llega hoy es muy diferente a como nos llegaba antes, cuando había más participación de gente de buena voluntad. Hay quienes lo siguen haciendo, pero por temas regulatorio, de controles y leyes, las entregas que antes se hacían de manera simple, hoy deben hacerse con apego a muchos criterios que estamos alcanzando para no perder la ayuda de instituciones y fundaciones y recibir cada vez más dinero.
A manera de ejemplo, indicó que hay quienes están dispuestos a ayudar, pero piden que antes de entregar recursos se cumplan criterios para garantizar que el dinero se gastará de manera eficiente, profesional y con transparencia. Estamos trabajando para estar a la altura de esas empresas y fundaciones, añadió.
El estándar que nos impusimos es el más alto, el más demandante, que es el del Monte de Piedad, que para dar dinero impone los criterios más elevados hoy en día. Si cumplimos sus estándares, en automático cumplimos cualquier otro y en eso estamos trabajando, agregó.
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