Un grupo de activistas internacionales, que se hacen llamar “Hacktivistas Guacamaya”, realizaron el mayor hackeo en la historia a la base de datos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en el cual entre otros muchos datos confidenciales, exponen la vulnerabilidad del Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC).
Los hackers internacionales, de acuerdo a un medio nacional, inicialmente pretendían solamente acceder a los datos del ejército de Chile, pero aprovecharon para vulnerar los datos de las fuerzas de defensa de varios países, incluido México.
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Los datos confidenciales extraídos de los servidores de los ejércitos de Chile, El Salvador, Perú, Colombia y México, fueron liberados por los hackers, en el caso de México, fueron seis terabytes de datos sensibles de seguridad nacional.
Esta gravísima irrupción en los sistemas digitales de seguridad de la Sedena, evidencia no solo el enorme poder que ahora detenta la dependencia castrense en esta administración, sino también la mínima inversión que se ha realizado en el rubro de la seguridad digital.
Pero el dato que más debería preocupar por lo menos a los habitantes de Cancún, el mas importante destino turístico de México, es la vulnerabilidad en seguridad que varios de los documentos confidenciales extraídos de su base de datos revelan.
Y es que, de acuerdo al medio que difundió el hackeo masivo a la Sedena, en los documentos se detalla por terminal, y hasta por hora, cuantos soldados hay en cada aduana, evidenciando una gravísima carencia de personal que el propio Ejército admite.
Un ejemplo flagrante lo representa la terminal dos del AIC, en donde la Secretaría acepta que lo optimo es contar con 56 elementos, pero solamente dispone de 14, incluso hay horarios en los que únicamente destinan a tres militares a este punto.
Tratándose de la importancia estratégica, de esta puerta de entrada no solo al Caribe Mexicano sino a buena parte del sureste del país, esta. carencia la pone en una terrible vulnerabilidad para cualquier acto relacionado con la seguridad.
Esto quedó de manifiesto en buena parte, cuando en marzo de este mismo año, un incidente con unos letreros, cuya supuesta caída fue confundida con disparos, causó el caos total en una de las terminales del aeropuerto.
En esa ocasión, numerosos videos tomados por trabajadores del lugar y pasajeros tanto locales como internacionales, dieron cuenta de la incapacidad de las autoridades para contener la alarma y poner orden.
Hasta el momento, esta filtración es apenas la punta del Iceberg, pues los miles de documentos liberados por los hackers, también revelan datos sobre el verdadero estado de salud del Presidente López Obrador, del estado real de fuerzas del Ejército en distintos puntos del país.
Así como de los numerosos contratos federales que le han sido asignados y sus respectivos gastos, sin dejar de mencionar los datos reales (cuyas cifras contrastan con las oficiales) de muchos operativos de alto impacto como el famoso “Culiacanazo”.
Se espera que en los siguientes días, mas información extraída de esos seis terabytes de información revelen más información importante.
Mega hackeo a Sedena revela vulnerabilidad de Aeropuerto de Cancún
Con Información de Agencias
