Con el objetivo de que los ciudadanos conozcan mas acerca de la masonería el “Grande Oriente de México” realizó ayer un evento abierto con el que dio inicio a sus trabajos 2019 y la instalación de venerables maestros representantes de grupos masónicos en esta ciudad, a la que asistieron representantes de Brasil, Belice, Tailandia y de distintos estados de la República.
Luego de la ceremonia, que se realizó en el edificio Libertadores de América, ubicado en la avenida Bonampak, Samuel Aguilar Ibarra, Serenísimo Gran Maestro, invitó a los ciudadanos a acercarse para conocer la masonería, “una escuela filosófica a la que puede entrar cualquiera que reconozca su imperfección y desee trabajar en su perfeccionamiento como ser humano”.
Antecedentes y valores de la masonería
La masonería es una escuela viva. Si bien en los años 1800 la mujer no podía ni votar y no era tomada en cuenta, era porque los masones de esa época así pensaban. Hoy en día, si uno de los principales juramentos del masón es respetar las leyes del país y la Constitución establece que hombre y mujer son iguales ante la ley, sería absurdo decir que se respeta la ley, pero no se acepta a la mujer, dijo.
La masonería liberal acepta a la mujer en todos los países. Si hablamos de libertad, igualdad y fraternidad, no podemos hablar de libertad si exigimos que pertenencia a alguna religión; no podemos hablar de igualdad si no dejamos participar a la mujer y tampoco podemos hablar de fraternidad si dividimos en buenos y malos, explicó.
Aguilar Ibarra, quien hace tiempo fue acusado de haber despojado del edificio Libertadores de América a las logias que lo ocupaban desde hace casi 40 años y de haber participado en los despojos de predios en Tulum durante la administración de Roberto Borge, reconoció que al ser humano le faltan valores y que hay que inculcarlos, tanto en masonería como en el comercio, educación y en toda la actividad humana.
La masonería es una escuela filosófica
Asimismo, aseguró que en las logias está prohibido platicar de política o intervenir en cualquier situación que tenga relación con eso, sin embargo, a nadie se le niega la posibilidad de participar en un partido, sea cual sea.
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Aquí venimos a perfeccionarnos y hacemos votos para que se perfeccionen todos los que están en los partidos y la política por el bien del país. La masonería es una escuela filosófica y puede entrar cualquiera que reconozca su imperfección y desee trabajar en su perfeccionamiento.
Finalmente, consideró que la violencia y otros males de la sociedad se originan en la falta de educación y de valores en casa.