Chetumal, Q. Roo.- Pedro Pablo Elizondo, obispo de la prelatura Chetumal-Cancún, dijo que la iglesia católica está lista para una transformación en donde no requieren masas de feligreses, sino más bien creyentes que fortalezcan el cristianismo. Advirtió sobre una crisis que han aprovechado detractores para debilitarla y que no se cuente con fe en momento de inseguridad, conflictos políticos, desintegración social o violencia. Iglesia católica no requiere masas de feligreses, sino creyentes.
Pablo Elizondo, afirmó que este año 2019 será una nueva oportunidad para que se siga fomentando la fe entre las familias, la unión de las mismas, así como también erradicar los hábitos que no son para fomentar una mejor vida entre los quintanarroenses.
El obispo de la Prelatura advirtió que en este año se buscará que se consoliden los católicos que tienen fe y creen en esta iglesia, no aquellos que solo van a misa pero tienen un estilo de vida que no va de acuerdo a los mandamientos de Dios.
Añadió que ya no se requieren grandes cantidades de fieles, sino de aquellos que fortalezcan a la iglesia romana para seguir cultivando valores y las palabras que requiere la humanidad.
Dijo que no se necesitan más corrientes, sino más bien, quienes sigan los mandamientos para transmitirlos a la sociedad y que se multipliquen con nuevos creyentes que no estén “dándose golpes de pecho y después critiquen a la iglesia de Dios”.
Consideró que esta es la nueva era de la iglesia y aunque los detractores han utilizado las debilidades de la iglesia, no desaparecerá, por el contrario afirmó que será una nueva oportunidad para crecer con verdaderos religiosos de la iglesia romana.
En cuanto a la inseguridad, apuntó que sigue afectando la imagen turística y a la ciudadanía, por lo que es necesario el trabajo de las autoridades para acotarla.
Reconoció que se vive una situación crítica originada por la pérdida de valores y la calificó como preocupante, ante el aumento de secuestros, delincuencia, narcotráfico y decadencia moral.
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