Adrián Marcelo revela que conflicto con Chessman fue planeado.
El conductor aseguró que la Comisión de Lucha Libre de Monterrey le hizo trampa en las pruebas de la licencia.
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Adrián Marcelo ha dado de qué hablar en el entorno de la Lucha Libre en las últimas semanas, especialmente por el pleito que tuvo con Chessman, un evento polémico, mismo que aceptó que fue planeado y que lo llevaría a su debut como luchador, según contó en el podcast Lucha Mexa.
“Yo no quería ser luchador, solo quería estar en la Triplemanía para darle otro ángulo que junto con Triple A planeamos. Me lesioné el hombro, casi me fracturo la clavícula entrenando con Toscano, me filtran el video entrenando con Chessman, se nos va para abajo”.
“Lo logro rescatar con un cachetadón que le meto que hasta Chessman me dijo: ‘te pasaste de lanza’, me vale decirlo, pero cuando la comisión no entiende lo que estamos haciendo, a mi no me importa la lana, viajamos a entrenar en México, tengo para hacer un documental, lo que iba hacer era dignificar la lucha, Chessman al final me respetó por la forma en cómo entrené”.
La pelea entre Adrián Marcelo y Chessman era uno de los platillos fuertes en Triplemania Regia que se realizó este domingo, pero no se pudo realizar luego de que el youtuber no obtuvo su licencia como luchador.
“Cualquier persona que sepa de preparación física hará empatía. Llego y nos ponen a correr 20 minutos en el último piso de la arena, me los aviento y le saco una vuelta a la banda y terminó corriendo a más alta velocidad, dije: ‘me voy a lucir, yo quiero esa licencia’. Después nos dice, suban las escaleras saltando y bájenlas corriendo, nos las aventamos; después nos dicen: ‘agarren parejas’, ahí empieza mi sospecha. Empiezan a hacer las parejas, cada quien con los de su peso y a mí me ponen con una persona de 120 kg, me tenía que cargar y darle una vuelta a la arena y después yo a él, él no pudo y yo peso 90 kilos”.
Adrián Marcelo aseguró que lo hicieron un chivo expiatorio y terminó dándoles las gracias durante la prueba de la licencia como luchador.
“Las cuerdas son cables metálicos, cada que cuerdas te enchuecan la espalda, todo mi respeto a quienes se dedican a eso, pero a mí me hicieron un chivo expiatorio, fue una trampa, había seis personas más según que buscaban el sueño de ser luchador y de pronto solo me gritaban, que sí podía, eso me sorprendió. Termino de cargar al güey y sentí que la rodilla se me rompía, seguimos con las pruebas y comencé a ver borroso y luego van patitos, agárrate los tobillos y nalgas al suelo y eran 15 pasos de ida y 15 de vuelta, me aventaron primero, ahí fue donde ya viendo borroso, termino, me paro y le doy la mano a uno de los viejos con máscara que son los sinodales le doy las gracias y les digo: quédense con su licencia, me doy la vuelta y le digo a Figueroa la lucha me vale madre, yo lo que quería era ayudar, estoy por irme y me meten a un cuartito y donde me toman la presión exagerando mucho en mis cuidados y les dije que estaba bien, solo que me di cuenta de lo que habían hecho”.
Adrián Marcelo revela que conflicto con Chessman fue planeado
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