Muere el entrenador Reinaldo Salazar por coronavirus.- Ayer domingo se dio a conocer que el padre de los medallistas olímpicos Iridia y Óscar Salazar, perdió la vida en la instalación temporal del IMSS en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
Muere Reinaldo Salazar por coronavirus
Según la fuente, el entrenador Reinaldo Salazar falleció víctima de covid-19 durante la madrugada de ayer domingo, y fue su hija, la medallista olímpica Iridia Salazar, quien confirmó la noticia.
Asimismo, de acuerdo a la información, Reinaldo murió en una instalación temporal que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) estableció en el Autódromo Hermanos Rodríguez después de estar varios días internado.
“Papá, yo tenía muchos planes contigo, pero Dios tenía uno aún mejor. Es imposible llorar de tristeza habiendo tantos momentos felices. Mis lágrimas son de amor, de agradecimiento y de mucha admiración. Agradezco a Dios por tu compañía todo este tiempo. Te amo, papá”, compartió Iridia en Facebook.
El señor Reinaldo había cumplido recientemente 65 años de edad y fue días después cuando presentó síntomas de coronavirus, los cuales de inicio se atendieron en aislamiento en hogar, pero con el paso del tiempo requirió de un hospital.
Tras conocerse su fallecimiento, el Comité Olímpico Mexicano (COM), la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) y una amplia gama de personalidades relacionadas con el deporte manifestaron su pesar por quien también fue un destacado deportista en su juventud con logros internacionales.
Lee también: Galilea Montijo se desmaya y sufre aparatosa caída al llegar a Hoy
“La familia olímpica mexicana se une a la pena que embarga a los hermanos taekwondoínes @Iridiatkd (Iridia Salazar) y @SalazarB_oscar (Oscar Salazar), medallistas olímpicos en Atenas 2004, por el deceso de su padre y entrenador Reinaldo Salazar y les deseamos pronta resignación. QEPD”, difundió el COM en sus redes sociales.
Reinaldo Salazar fue uno de los primeros medallistas mundiales mexicanos en taekwondo con el bronce que conquistó en la edición de Chicago 1977 (58 kg) y la plata en la edición de Stuttgart 1979 (60kg). Como entrenador nacional condujo a sus hijos Óscar (58 kg) y a Iridia (57kg) al podio en las magnas justas deportivas de Atenas enriqueciendo la tradición mexicana en taekwondo.