Samir Inda, canterano de Chivas, debutó con el primer equipo y lo hizo de manera soñada: anotando el gol de la victoria ante Necaxa en tan solo diez minutos en la cancha, sin embargo lo que más emocionó al público fue que el futbolista le regalo su playera a su madre, quien rompió en llanto.
La escena fue ampliamente replicada en redes sociales y comentada por la prensa deportiva como una de las imágenes más conmovedoras de la jornada. Para muchos, el gesto de Inda representa la esencia del futbol: la familia como motor y la recompensa al esfuerzo de quienes han acompañado al jugador desde sus primeros pasos en el balompié.
Al término del encuentro, Gabriel Milito, técnico del Rebaño Sagrado, explicó por qué decidió convocar al juvenil: “Hizo la pretemporada, lo bajamos para que tuviera minutos y ante las necesidades de no tener contenciones, fue necesario convocarlo. Y cada chico que es convocado se espera que pueda aportar lo que tienen”, destacó el estratega, quien elogió el carácter mostrado por Inda.
El mediocampista nació el 7 de octubre de 2007 en Tepic, Nayarit. Inició su carrera en las fuerzas básicas del Guadalajara a los 14 años y rápidamente ascendió en las categorías juveniles: Sub-14, Sub-16 y Sub-18. Sus destacadas actuaciones lo llevaron a ser considerado en categorías superiores como la Sub-23 y Tapatío, filial con la que acumuló minutos en la Liga de Expansión.
Con la llegada de Milito al banquillo rojiblanco, Inda fue integrado a la pretemporada del primer equipo. Su calidad técnica, temple y entrega convencieron al cuerpo técnico de darle un lugar por encima de otros juveniles, lo que terminó por abrirle la puerta a su debut oficial.
