Ozzy Osbourne, la estrella del heavy metal, y vocalista de Black Sabbath murió de un ataque cardíaco y sufría de enfermedad coronaria y Parkinson, según un certificado de defunción presentado en un registro en Londres, señala The New York Times.
El documento, presentado por Aimée Osbourne, la hija de Osbourne, menciona un paro cardíaco y una enfermedad coronaria entre las causas, y señala que padecía Parkinson.
El certificado dice que Osbourne murió de “(a) Paro cardíaco fuera del hospital (b) Infarto agudo de miocardio (c) Enfermedad de la arteria coronaria y enfermedad de Parkinson con disfunción autonómica (causas articulares)”.
Recientemente Kelly Osbourne dedicó un mensaje a los fans de su padre, el legendario Ozzy Osbourne, a semanas de su muerte, “Gracias por ayudarme a cargar con este dolor», escribió.
En su desgarrador mensaje, la hija del ícono del heavy metal agradeció a los fans, amigos y todo aquel que, desde distintos rincones del mundo, le han enviado palabras de aliento.
Asimismo, reconoció que aún no se siente lista para reaparecer ante los reflectores; sin embargo, sentirse acompañada la ha ayudado a salir adelante.