Por Staff
La elección del próximo domingo es un despertar de los ciudadanos que han decidido decir basta a la corrupción, a la inseguridad, a seis años de Enrique Peña Nieto y doce años de guerra, señaló el premiado actor Diego Luna en una entrevista con la National Public Radio (NPR) de Estados Unidos.
“Creo que está ocurriendo un despertar, un despertar ciudadano de estos terribles seis años que acabamos de vivir y una guerra [contra las drogas] que ha estado ocurriendo durante 12 años, desde que [el ex Presidente Felipe] Calderón comenzó a luchar contra los narcotraficantes”, apuntó a NPR.
Agregó el histrión que: “luego también tuvimos un terremoto que nos recordó cuán débiles somos, ya sabes, cuán débiles son nuestras instituciones. Todos estos escándalos de corrupción, donde comenzamos a tener una idea de cuánto nos estaban robando. Y todo esto, creo que está creando un despertar. Hay una necesidad de decir: ‘Ya basta’. Ya es suficiente. Y creo que la gente [ya] está en eso”.
Diego Luna dijo que el problema es que vivimos en un país muy peligroso. “Es una elección que está sucediendo en un país donde [más de 100] candidatos y trabajadores electorales han sido asesinados. Hemos normalizado la violencia y hemos aceptado que este es el México en el que vivimos. Tenemos esta porción privilegiada de la sociedad que no tiene que interactuar con esa violencia [y que dice]: ‘Bueno, lo que sea. Ya sabes, no es nuestro problema porque es la guerra contra las drogas y porque hay un mercado en los Estados Unidos y nunca va a parar, entonces, ¿qué podemos hacer?’”.
Asimismo, aseguró que “y uno responde: ‘No, hay muchas cosas que deberíamos hacer’. Porque esta violencia está aumentando y no creo que tengamos que esperar hasta que nos suceda algo. Sigo creyendo en las historias y todavía creo que lo somos, la mayoría de nosotros somos personas que podemos sentir por los demás. Y creo que esta elección es aquella en la que la gente comienza a votar no solo por ellos mismos, sino por los demás”.
Por otra parte, criticó la apatía de los mexicanos hacia los migrantes. “No nos importa un comino lo que les sucede a los migrantes que cruzan México desde Centroamérica tratando de llegar a los Estados Unidos o de querer quedarse en México. Y la forma en que nuestro gobierno los trata, las cosas que tienen que pasar, la cantidad de abusos. Es ridículo, es una locura. Y nadie parece verse conmovido por estas cosas. Entonces, es una lucha contra la indiferencia [que] para mí es una prioridad, porque nos estamos acostumbrando a este tipo de injusticia”.
“Hay algo que escuché recientemente –agregó–: si los derechos que tengo no son los mismos que todos tienen, entonces mis derechos son un privilegio”.
También dijo que se ha involucrado en el activismo porque es su educación. “Creo que se trata de mi padre/ Es lo que vi a mi padre hacer. Recuerdo que mi padre siempre leía el periódico y comentaba lo que había allí; y cuán importante fue ese debate que podría ocurrir después del almuerzo en la casa; qué tan importante fue […] involucrarse con los problemas”.
