Gabriel Soto, el famoso actor de telenovelas, se refirió al posible romance entre su exesposa y madre de sus dos hijas, Geraldine Bazán, y el empresario Giovanni Medina, quien fuera pareja de Ninel Conde. El artista se mostró respetuoso y deseó lo mejor para la actriz, con quien tuvo un divorcio conflictivo por la supuesta intervención de Irina Baeva en su matrimonio.
Gabriel Soto fue abordado por los medios de comunicación en el aeropuerto de la capital mexicana, donde le preguntaron por las recientes imágenes que muestran a Geraldine Bazán y Giovanni Medina juntos, compartiendo con sus respectivos hijos, Alexa Miranda y Emmanuel. El actor evitó entrar en detalles y se limitó a decir que lo único que le importa es la felicidad de sus hijas y de su ex.
“De la vida personal de Geraldine no me toca opinar, pero mientras ella esté bien y feliz, y mientras mis hijas estén bien y felices, le deseo toda la felicidad”, expresó el protagonista de “Te acuerdas de mí”. Ante la insistencia de los reporteros, Soto agregó: “Mientras ellas estén bien y sean tratadas bien todo está bien. Finalmente, eso es lo importante, que haya un buen trato y respeto, y obviamente mis hijas siempre me cuentan todo. Mientras ella esté feliz, mis hijas van a estar felices, y mientras yo esté feliz mis hijas van a estar felices y de eso se trata la vida, de ser felices”.
Asimismo, Gabriel Soto enfatizó que no es su lugar opinar sobre los asuntos amorosos de su ex. “No me compete opinar de la vida personal de Geraldine, simplemente le deseo que sea muy feliz, y que sea muy feliz siempre, porque te repito, si ella está feliz, mis hijas van a estar bien”.
Por otro lado, el actor de 48 años también se defendió de las acusaciones de un medio peruano que lo señaló por no pagar impuestos cuando trabaja en ese país. “Sí lo vi, pero tengo mis papeles en orden y créeme que pago impuestos, y muchos. En todos lados donde trabajo pago impuestos, evidentemente, yo tengo todos mis papeles en orden”, afirmó.
Te puede interesar: Russell Brand tiene una nueva investigación en Reino Unido por acoso
