Luego de casi cinco meses de huelga, el sindicato de escritores de Estados Unidos y la alianza de productores de cine y televisión han llegado a un acuerdo provisional que podría poner fin al conflicto que ha paralizado la industria del entretenimiento.
El anuncio se hizo la noche del lunes, tras una larga negociación que duró cinco días y que se centró en el uso de la inteligencia artificial en la creación de contenidos audiovisuales.
El acuerdo provisional, que aún debe ser ratificado por los más de 11 mil miembros del WGA, tiene una vigencia de tres años y tiene una serie de beneficios y protecciones para los escritores en diferentes áreas, como las regalías por el streaming, los derechos de autor, las condiciones laborales, la salud y el bienestar.
Según el comunicado del sindicato, el acuerdo es «excepcional» y refleja la unidad y la solidaridad de los escritores con sus colegas sindicalizados.
Sin embargo, el acuerdo no implica el fin inmediato de la huelga, que se mantiene hasta que se vote por el levantamiento formal, previsto para el miércoles. Además, el acuerdo no resuelve todos los problemas que enfrentan los escritores en la era digital, como la competencia desleal, la precarización, la censura y la falta de diversidad e inclusión.
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