Justin Timberlake se declaró culpable ante un tribunal de Long Island, Nueva York, tras haber sido detenido en junio por conducir bajo los efectos del alcohol en la localidad de Sag Harbor.
Gracias a un acuerdo con la fiscalía, Timberlake evitará la pena de cárcel y en su lugar pagará una multa de 500 dólares, cumplirá 25 horas de servicio comunitario y participará en la grabación de un anuncio de concienciación pública sobre los peligros de conducir ebrio.
A su salida de la corte, Timberlake ofreció declaraciones a los medios, instando a otros a no cometer el mismo error. «Aunque hayan bebido una vez, no se pongan al volante de un coche. Hay tantas alternativas. Llamen a un amigo, tomen un Uber. Hay muchas aplicaciones de viajes. Espero que quienquiera que me vea, pueda aprender de un error que, ciertamente, he cometido», expresó el artista.
Inicialmente, Timberlake se había declarado no culpable, pero decidió cambiar su declaración para obtener una reducción de la pena, que originalmente contemplaba un año de cárcel y una multa de 2 mil 500 dólares. Como parte del acuerdo, también se le suspenderá su licencia de conducir por 90 días.
El cantante, conocido por su origen en un pequeño pueblo, reconoció el impacto de su acción en la comunidad de Sag Harbor. «Solo puedo dar las gracias a todas las personas involucradas, el tribunal, el departamento de Policía… Ahora todos pueden estar más seguros cuando vayan por ahí», concluyó Timberlake.
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