Meghan Markle, duquesa de Sussex, insiste en romper las reglas reales, y una vez más lo hace al anunciar que no quiere que los médicos de la Reina le atiendan el parto y contratará a su propio equipo obstétrico
La duquesa de Sussex, para variar sigue rompiendo tradiciones, y en la recta final de su embarazo, no solo sorprendió al decir que no planea tomarse la esperada foto saliendo del hospital tras dar a luz, ahora dice que tampoco quiere que los ginecólogos reales estén en su parto.
Alan Farthing y Guy Thorpe-Beeston, han sido los ginecólogos de la realeza durante muchos años y son especialistas en partos de alto riesgo. Asistieron en la llegada al mundo de los hijos de la princesa Diana y también de los de Kate Middleton.
Meghan Markle continua rompiendo reglas y ahora rechaza que los ginecólogos reales atiendan su parto
Sin embargo, pese a que estos médicos se encuentran entre los mejores del mundo. Ninguno de ellos desempeñará el papel principal en el alumbramiento de Meghan Markle.
La ex actriz estadounidense decidió no utilizar los servicios de los prestigiosos médicos de la Reina al dar a luz. En su lugar, la duquesa de Sussex ha nombrado a su propio equipo de profesionales, liderados por una mujer.
«Meghan dijo que no quiere a hombres en traje en su parto. Insistió en que quería su propio equipo. Dejó a algunos de nosotros un poco desconcertados», afirmó una fuente cercana a la realeza al Daily Mail
La duquesa de Sussex insistió en que prefería contratar a su propio equipo en lugar de ser atendida por los médicos de la realeza
Pero, aunque amablemente haya declinado a Farthing y Thorpe-Beeston. Por cuestiones de protocolo, los médicos de la Reina no pueden ser excluidos por completo del nacimiento. Los doctores estarán presentes y si algo sale mal, intervendrán y se harán cargo del procedimiento.
Fuentes cercanas a la duquesa de Sussex insistieron en que su decisión no ha causado ninguna ofensa.
Meghan Markle se resiste a seguir las tradiciones y declina los servicios de los médicos reales
Según el tabloide británico, la elección de Meghan podría ser vista por algunos como innecesariamente extravagante. Los médicos de la Reina no cobran por prestar sus servicios a la realeza, pues este título es considerado un gran honor y les genera numerosos pacientes, pero contratar a un nuevo equipo de especialistas costará decenas de miles de libras.
Meghan también romperá con otra tradición real: no dará a luz en la famosa ala ‘Lindo’ en el Hospital de St. Mary, donde Lady Di y Kate Middleton han tenido a sus hijos. Es probable que Meghan y Harry elijan un hospital más cercano a su nuevo hogar, en Windsor.
Fuente: Sputnik Mundo