Rodeado de críticos y manifestantes en la sede de la Organización de Naciones Unidas (ONU), el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo este viernes ante la Asamblea General que “darles a los palestinos un Estado, es como darle un Estado a Al Qaeda después de los atentados del 11 de septiembre, no lo vamos a hacer”, al afirmar que su nación “debe terminar la tarea” contra Hamás en Gaza, en un discurso desafiante a pesar del creciente aislamiento internacional por su negativa a poner fin a la devastadora guerra en Gaza. Habló después de que docenas de delegados de varias naciones abandonaran en masa el salón cuando él comenzó su alocución.
Delegados de la ONU protagonizaron una retirada masiva cuando el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, subió al estrado, poco antes de lanzar duras críticas contra las naciones que, según él, han “librado una guerra política y legal” contra su país.
Varios asistentes lo abuchearon mientras condenaba el creciente reconocimiento internacional del Estado palestino y afirmaba que Israel continuará la lucha en Gaza y “terminará el trabajo” de eliminar a Hamas. Estas declaraciones desafían la presión internacional que exige a Netanyahu detener una guerra que está por entrar en su tercer año.
Frente a filas de asientos vacíos en la Asamblea General de la ONU este viernes, Netanyahu rechazó de forma tajante la idea de conceder un Estado a los palestinos. Además, envió un mensaje directo a los líderes mundiales que esta semana lo reconocieron: “No vamos a permitir que nos impongan un Estado terrorista por la fuerza”.
Decenas de delegados abandonaron la sala cuando Netanyahu, quien enfrenta una orden de arresto por crímenes de guerra emitida por la Corte Penal Internacional, subió al estrado. “Los líderes occidentales pueden haber cedido ante la presión”, dijo. “Y les garantizo una cosa: Israel no lo hará”, aseveró en respuesta a las recientes decisiones de los países de reconocer el Estado palestino: “Su vergonzosa decisión alentará el terrorismo contra los judíos y contra personas inocentes en todas partes”.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo ante la Asamblea General de la ONU que “darles a los palestinos un Estado, es como darle un Estado a Al Qaeda después de los atentados del 11 de septiembre, no lo vamos a hacer». Habló después de que docenas de delegados de varias naciones abandonaran en masa el salón cuando él comenzó su alocución, el 26 de septiembre de 2025.
Mientras el líder israelí hablaba, gritos ininteligibles resonaron en la sala. Se oyeron aplausos en otros sectores. La delegación estadunidense, que ha apoyado a Netanyahu en su campaña contra Hamas, permaneció en su lugar. Las pocas potencias mundiales presentes, Estados Unidos y el Reino Unido, no enviaron a sus funcionarios de mayor rango, ni siquiera a su embajador ante la ONU, a su sección. En cambio, esta se llenó con diplomáticos de menor rango.
“El antisemitismo es difícil de erradicar. De hecho, no desaparece en absoluto”, afirmó Netanyahu. Netanyahu acusa habitualmente a sus críticos de antisemitismo.
Netanyahu enfrenta aislamiento internacional, acusaciones de crímenes de guerra y una creciente presión para poner fin a un conflicto que no ha parado de intensificarse. El discurso de este viernes fue su oportunidad de contraatacar en la principal plataforma de la comunidad internacional.
El premier mostró un mapa de la región titulado “La Maldición”, que marcó con un rotulador. Subió al podio con un pin que contenía un código QR que conducía a un sitio web sobre el 7 de octubre, creado específicamente para la diplomacia pública internacional. Los miembros de la delegación del primer ministro, los ministros y quienes lo acompañaban también llevaban pins idénticos.
Netanyahu elogió con frecuencia al presidente Donald Trump, su principal aliado en su estrategia política y militar en la región.
En tanto, el ejército instaló altavoces en la frontera entre Israel y Gaza para asegurarse de que los gazatíes escuchen su discurso, mientras que la oficina del primer ministro anunció que “en una operación sin precedentes”, se haría cargo de los teléfonos móviles de los residentes de Gaza y de los operativos de Hamas para transmitir el discurso en directo a través de ellos. No quedó claro de inmediato si esto ocurrió ni en qué medida.

El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu sostiene un mapa durante su discurso en el 80mo período de sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas, el viernes 26 de septiembre de 2025, en la sede de la ONU. (Foto AP/Stefan Jeremías)
En los últimos días, Australia, Canadá, Francia, el Reino Unido y otros países anunciaron su reconocimiento de un Estado palestino independiente.
La Unión Europea está considerando imponer aranceles y sanciones a Israel. Este mes, la asamblea aprobó una resolución no vinculante que insta a Israel a comprometerse con una nación palestina independiente, algo que Netanyahu ha calificado de imposible.
Abandono de delegaciones en la ONU durante discurso de Netanyahu, demuestra “aislamiento” de Israel
El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha asegurado este viernes que el gesto de numerosas delegaciones de abandonar la Asamblea General de Naciones Unidas durante el discurso del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, demuestra el “aislamiento” a nivel internacional de Israel.
“El boicot de las delegaciones a su discurso es una manifestación del aislamiento de Israel y de las consecuencias de su guerra de exterminio”, ha afirmado en un comunicado el portavoz de la milicia palestina, Taher al Nunu.
Asimismo, ha indicado que Netanyahu tendría que estar, en vez de en la sede de Naciones Unidas, en prisión por ser un “criminal de guerra”. “Detener la guerra y castigar a la entidad sionista (Israel) es la postura moral y humanitaria que se exige a los líderes mundiales”, ha resaltado Al Nunu.
Con información de agencia AP, The Independent y Europa Press
