“No se adoptaron decisiones importantes en la Cumbre de Tianjin de la Organización de Cooperación de Shanghai, a la que también asistieron los líderes de Irán, Pakistán, Turquía, Bielorrusia, y los países de Asia Central y el Cáucaso”, dice The Wall Street Journal. “Pero las imágenes cuidadosamente coreografiadas del líder chino Xi Jinping, el Primer Ministro indio Narendra Modi y el Presidente ruso Vladímir Putin abrazándose enviaron un poderoso mensaje a Washington, mientras Donald Trump busca contener a Beijing, romper el vínculo de Rusia con China y alejar a India del petróleo ruso”.
La cordialidad de la conferencia de Tianjin hará sonar las alarmas en las capitales occidentales, le dijo Michael Fullilove, director ejecutivo del centro de estudios Lowy Institute en Australia, al mismo diario. “El trato amable del Presidente Trump a Vladímir Putin no ha contribuido en nada a distanciar a Rusia de China”, afirmó. “Su trato duro a Narendra Modi, en cambio, está acercando a India a Rusia y mejorando sus relaciones con China”.
India es la piedra angular de la estrategia estadounidense para evitar la dominación china en Asia, señala The Wall Street Journal. Las relaciones chino-indias han permanecido prácticamente congeladas desde que estallaron los mortíferos enfrentamientos en la disputada frontera entre ambos gigantes en 2020. Modi viajó a China por primera vez en siete años después de que la abrupta decisión de Trump de imponer aranceles del 50 por ciento a India, la mitad de ellos como castigo por la compra de petróleo ruso barato por parte de Nueva Delhi, provocara una indignación generalizada en India.
“Estos aranceles son más altos que los impuestos contra China, rival estratégico de Estados Unidos, y han venido acompañados de numerosas declaraciones de funcionarios de la Administración Trump que han exacerbado la ira india. El asesor comercial de Trump, Peter Navarro, causó especial indignación en los últimos días al usar términos de casta al afirmar que los brahmanes indios se están lucrando a costa del pueblo indio con el comercio de petróleo con Rusia. Hasta la fecha, la Administración Trump no ha impuesto sanciones adicionales contra Rusia, a pesar de las reiteradas amenazas de hacerlo”, agrega la crónica de lo que pasó este fin de semana, publicada por este influyente periódico especializado en economía y finanzas.
La reunión en Tianjin representó un reajuste entre China e India, y un mensaje para Washington de que India valora su autonomía estratégica, le dijo Kabir Taneja, subdirector de la Observer Research Foundation, un centro de estudios con sede en Nueva Delhi. “Washington no cederá en ningún sentido, y ningún Primer Ministro de India, que es la mayor democracia del mundo, puede ignorar la opinión pública. Esto significa que hay que plantar cara a Estados Unidos y decir que no nos dejaremos intimidar”, afirmó.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, segundo por la izquierda, y el primer ministro indio, Narendra Modi, caminan para asistir en la Organización de Cooperación de Shanghái en Tianjin, China, el lunes 1 de septiembre de 2025. (Alexander Kazakov, Sputnik, Kremlin Pool Foto via AP)
La crónica de The New York Times la escriben David Pierson y Mujib Mashal, desde Tianjin, China, y desde Nueva Delhi, India, respectivamente.
“Fue una escena en el este de China casi con certeza destinada a una audiencia del otro lado del mundo: los líderes de China, Rusia e India, las tres mayores potencias no alineadas con Occidente, sonriendo y riendo como buenos amigos mientras se saludaban en una Cumbre el lunes. Comienza con Modi y Putin tomados de la mano y entrando en una sala de reuniones llena de otros líderes mundiales. Se dirigen directamente a Xi Jinping, se dan la mano y forman un círculo cerrado. Intercambian algunas palabras antes de que los traductores se unan al grupo. Putin esboza una amplia sonrisa y Modi suelta una carcajada. En un momento dado, Modi les da la mano a los dos líderes”.
Según los analistas, dicen los autores, “la imagen transmitía múltiples mensajes. La cordialidad entre Xi y Putin pretendía transmitir un estrecho vínculo entre ellos como líderes de un orden mundial alternativo que desafía a Estados Unidos. Modi buscaba demostrar que India tiene otros aliados importantes, incluida China, a pesar de una disputa fronteriza sin resolver, si la Administración Trump decide seguir distanciando a Nueva Delhi con aranceles”.
“La óptica es un aspecto clave de esta Cumbre, y la Casa Blanca debe comprender que sus políticas harán que otros países busquen alternativas para satisfacer sus intereses”, dijo a The New York Times Manoj Kewalramani, jefe de estudios del Indo-Pacífico en la Institución Takshashila en Bangalore, India.
Los periodistas del Times señalan que las imágenes en la ciudad de Tianjin, donde se reunieron más de 20 líderes provenientes principalmente de Asia Central y del Sur de Asia, “mostraron cómo la disrupción geopolítica causada por Trump ha dado a China y Rusia una plataforma para reunir a socios como Irán, Kazajstán, Kirguistán, Bielorrusia y Pakistán”.
Se imaginan quien se esta retorciendo con estas imágenes:
🇨🇳🤝🇷🇺🤝🇮🇳
Encuentro cordial de Putin, Modi y Xi antes de la cumbre de la OCSLos líderes de Rusia, la India y China, Vladímir Putin, Narendra Modi y Xi Jinping, respectivamente, hablaron informalmente antes de la reunión pic.twitter.com/gYN0y4q4oS
— aapayés (@aapayes) September 1, 2025
“China quiere aprovechar la impopularidad de las caóticas políticas comerciales de Estados Unidos para abrir una brecha entre Washington y el resto del mundo, argumentando que puede servir como un líder global más estable. En su discurso inaugural ante la Organización de Cooperación de Shanghai, una agrupación euroasiática de seguridad, Xi lanzó indirectas no tan sutiles a Estados Unidos, instando a los miembros del grupo a oponerse a la ‘mentalidad de Guerra Fría, la confrontación entre bloques y la intimidación’. Afirmó que la organización debe ‘seguir adelante’ en medio de la ‘convulsión global’”’.
Putin “pronunció un discurso en el que reiteró sus afirmaciones sobre la responsabilidad de Occidente en la guerra de su país en Ucrania. También elogió una reciente cumbre que mantuvo con el Presidente Trump en Alaska para abordar el conflicto y afirmó que ya había informado detalladamente a Xi sobre dichas conversaciones, comentarios que parecen indicar el papel central de China en la estrategia diplomática rusa”, dicen David Pierson y Mujib Mashal.