ARH-06. SANÁ (YEMEN), 08/04/2019.- Una niña yemení busca su mochila en una escuela evacuada por un bombardeo en Saná (Yemen), este lunes. Al menos trece personas han muerto y unas 80 han resultado heridas por la explosión de un tanque de gas para cocinar el pasado domingo, situado en un taller cerca de una escuela en la capital del Yemen, Saná, que ha sido causada supuestamente por un bombardeo, según el Gobierno rebelde. EFE/ Yahya Arhab
Beirut, Libano.- Unicef afirmó hoy que la explosión sucedida este domingo cerca de dos escuelas en Saná, capital de Yemen, dejó al menos 14 niños muertos y otros 16 menores heridos de gravedad, que en su mayoría son menores de nueve años de edad.
Una niña yemení busca su mochila; la explosión presuntamente, fue en un tanque de gas, provocada por el bombardeo cerca de la escuela.
Según un comunicado de la Organización, los niños murieron durante una explosión que tuvo lugar cerca de dos escuelas en la capital yemení, y la mayoría de las víctimas y los heridos son menores de nueve años.
Varias mochilas y pertenencias esparcidas por el suelo de una escuela evacuada por un bombardeo en Saná capital de Yemen.
El último recuento de Unicef asegura que más de 400 niños han fallecido o han resultado heridos gravemente por la violencia que ha generado el conflicto en el país, desde principios de 2019.
Yemeníes asisten al funeral de los niños que perecieron el pasado domingo en un ataque aéreo perpetrado por las fuerzas saudíes, este miércoles en Saná, Yemen.
El director de Unicef para Oriente Medio y el Norte de África, Geert Cappelaere, dijo que Unicef “ha podido verificar” hasta este momento la muerte de 14 menores, aunque “es probable que aumente el número de muertos y heridos”.
“Los niños heridos de gravedad, muchos de los cuales luchan por sus vidas, están ahora en hospitales en Saná. La mayoría son menores de nueve años. Una niña sucumbió a sus heridas ayer por la mañana”, afirmó el director.
El estallido, que tuvo lugar cerca de dos escuelas causó una “explosión de metralla” (esquirlas) que destrozó las ventanas lanzó “cristales rotos” que cayeron dentro de las aulas.
Cappelaere añadió, además, que es “difícil de imaginar” el “horror” que experimentaron esos niños y la “culpabilidad” que deben sentir los padres, cuyo único objetivo es “enviar a sus hijos a la escuela”.
Funerales de los niños; según la Organización Mundial de la Salud, más de 10 mil personas, en su mayoría civiles, han muerto y hay más de 60 mil heridos.
Asimismo, remachó que una de cada cinco escuelas ya no se puede utilizar como resultado directo del conflicto, y que algunos centros fueron atacados directamente, mientras que otros están siendo utilizados con fines militares.
El conflicto armado estalló en el país árabe a finales de 2014 cuando los hutíes tomaron el control de amplias zonas del oeste y el norte del país, incluida Al Hudeida y la capital, Saná, y se recrudeció en 2015 con la intervención de una coalición militar liderada por Arabia Saudí en apoyo del Gobierno.
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