Jimmy Carter, el cultivador de cacahuate que intentó limpiar la imagen de la Casa Blanca después del escándalo de Watergate y la guerra de Vietnam, y que luego de una derrota electoral aplastante se convertiría en defensor global de los derechos humanos y la democracia, murió ayer. Tenía 100 años de edad.
El Centro Carter informó que el presidente 39 de Estados Unidos falleció –más de un año después de que comenzó a recibir cuidados paliativos– en su casa en la pequeña localidad de Plains, Georgia, donde él y su esposa, Rosalynn, quien pereció en noviembre de 2023 a los 96 años, pasaron la mayor parte de su vida.
El ex mandatario (1977-1981) más longevo nació en Plains, Georgia, donde fue agricultor de cacahuates de 1953 a 1977 junto con su esposa antes de convertirse en gobernador.
Fue un mandatario (de Georgia 1971-1975) poco conocido cuando en la filas del Partido Demócrata empezó su carrera rumbo a la presidencia antes de las elecciones de 1976.
En 1977, derrotó al entonces presidente Gerald R. Ford, capitalizando su condición de forastero de Washington tras la guerra de Vietnam y el escándalo de espionaje y conspiración en la Casa Blanca que destapó el Watergate, y que provocó la renuncia de Richard Nixon en 1974.
Durante su presidencia, Carter se comprometió con los derechos humanos y plantó cara a las dictaduras militares latinoamericanas que entonces se imponían atrozmente en América Latina. Disfrutó de dos primeros años brillantes. El 7 de septiembre de 1977 firmó con el general panameño Omar Torrijos los históricos Tratados Torrijos-Carter por los que el país istmeño recuperó la soberanía del Canal de Panamá.
Un año después, el 17 de septiembre de 1978, firmó con los entonces presidentes, el egipcio, Anuar al Sadat, y primer ministro israelí, Menaguen Beguin, el pacto de paz conocido como los Acuerdos de Camp David.
Imagen de archivo de Jimmy Carter, en el año de 1976, siendo gobernador por el estado de Georgia.
Carter fue uno de los primeros líderes internacionales en tomar en serio el cambio climático, dispuso en la Casa Blanca que se redujera la calefacción para conservar energía e instaló paneles solares además de aprobar leyes para proteger del desarrollo millones de acres de tierra virgen en Alaska.
Pero su presidencia acabó plagada de crisis económicas y de política exterior. En el ámbito interno, una escasez energética continua hizo que el precio del petróleo se triplicara entre 1978 y 1980, lo que provocó colas en las gasolineras estadounidenses.
Jimmy Carter frente al mundo
En el ámbito exterior, Carter sufrió numerosos contratiempos, los más graves fueron la toma de rehenes estadounidenses en Irán y el desastroso y fallido intento de rescatar a los 52 estadunidenses cautivos en 1980 y la invasión soviética de Afganistán.
En noviembre de ese año perdió la relección ante el republicano Ronald Reagan, quien ganó de forma abrumadora e inauguró una era de conservadurismo.
No obstante, con el paso de los años, surgió una imagen mejorada de Carter a quien se le reconocieron sus actividades pospresidenciales y se revaluó su gestión.
Carter fundó en Atlanta el Centro Carter en 1982 para impulsar el desarrollo, la salud y la resolución de conflictos en el mundo. También viajó por el mundo como emisario de paz, observador electoral y defensor de la salud pública. Visitó Corea del Norte en 1994 y Cuba en 2002.
En 1999, recibió la Medalla Presidencial de la Libertad, la mayor condecoración civil de Estados Unidos, de manos del presidente Bill Clinton.
En 2002 obtuvo el Premio Nobel de la Paz por sus esfuerzos en pro de la justicia social y económica.
En 2007, se sumó a Los Ancianos (The Elders), un grupo de líderes internacionales que analizaba problemas globales, creado por Nelson Mandela.
En 2023, comenzó a recibir cuidados paliativos en su hogar tras varias estancias breves en el hospital. El 1º de octubre celebró sus 100 años.
El presidente saliente, Joe Biden, lo describió como un hombre de principios, fe y humildad, mientras el mandatario electo, Donald Trump, quien recientemente señaló que entregó totamente el Canal de Panamá a la nación istmeña, dijo que el fallecido líder hizo todo lo que estuvo a su alcance para mejorar la vida de todos los estadounidenses.
Carter nos enseñó a todos lo que significa vivir una vida de gracia, dignidad, justicia y servicio, señaló su correligionario y ex mandatario Barack Obama.
Si bien la historia puede haber sido dura con el presidente Carter en ocasiones, hoy se le recuerda como un líder mundial en materia de derechos humanos, afirmaron Martin Luther King III, activista de derechos humanos e hijo de Martin Luther King Jr, y Andrea Waters King, informó el periódico The Guardian.
A los homenajes se sumaron los ex presidentes George W. Bush y Bill Clinton, la vicepresidenta Kamala Harris y la ex secretaria de Estado Hillary Clinton.
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México externó sus más sinceras condolencias al pueblo y al gobierno estadunidense por esta lamentable pérdida.
Elogiaron por separado la trayectoria de Carter los mandatarios de Cuba, Miguel Díaz-Canel; Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; Panamá, José Raúl Mulino; el primer ministro canadiense, Justin Trudeau; el de Francia, Emmanuel Macron; su par de Egipto, Abdel Fatah al Sisi, y Tedros Adhanom Ghebreyesus, director de la Organización Mundial de la Salud, entre muchas otras personalidades, así como los gobiernos de Venezuela, Guatemala, Honduras y Ecuador.
Con información de agencias AP, AFP, Reuters, The Independent y Prensa Latina
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