En una escuela secundaria de Bartow, Florida, la Policía arrestó este martes a dos niñas de 11 y 12 años de edad, quienes dijeron ser adoradoras de satanás y según los agentes las menores tenían planeado matar a una veintena de compañeritos de clase para posteriormente beberse la sangre y finalmente suicidarse, a las jovencitas les decomisaron armas blancas que utilizarían en la supuesta masacre.
De acuerdo a las investigaciones que realizó el jefe de la Policía de Bartow, Joe Hall, las niñas esperarían a sus víctimas en el baño, tenían previsto «acuchillarles la garganta, mutilar sus cuerpos, comerse la carne y beberse la sangre».
El plan macabro era quitarle la vida a 25 personas, compañeros de clase. El objetivo principal de las jovencitas era asegurarse de que eran «los peores pecadores», lo que les permitiría «pasar la eternidad en el infierno con satanás».
Los cargos por las cuales fueron detenidas las dos menores, alumnas de la escuela Bartow Middle School, fueron conspiración para cometer un homicidio, posesión de arma en propiedad escolar, portación de arma e interrupción de actividades escolares.
Todo estaba planeado para cometer los crímenes, pero afortunadamente se vino abajo; el martes una llamada automática de la escuela a la casa de una de las menores le notificó a los padres que su hija no había llegado a clase, así lo informó el jefe de la Policía de Florida.
Minutos después la madre de la menor llamó desesperadamente a la escuela y el subdirector le confirmó que su hija y otra niña fueron encontradas en el interior del baño.
A una de ellas se le encontró un cuchillo de carnicero y otro de cocina. Además de un cortador de pizza y una copa, por lo que fueron llevadas a las oficinas del director.
Tras las investigaciones, los detectives hallaron en las casas de las menores un mapa hecho a mano que incluía la frase «ir a matar al baño».
«Hoy, hay clase de salud, gracias a Satán, lo haremos rápidamente», decía una nota, según la policía. Tras una revisión a los celulares de las menores se encontraron mensajes sobre el complot, dijo el jefe policiaco.
Al plantel educativo ya habían llegado agentes de la Policía, tras ser alertados de una amenaza contra estudiantes de la escuela.
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