Genaro García Luna es sentenciado a 38 años de prisión
38 años de prisión le fueron impuestos como condena a Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México, tras ser declarado culpable en un juzgado de Estados Unidos por cinco delitos relacionados con el narcotráfico.
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García Luna fue hallado culpable en febrero de 2023 por los delitos de participación continua en una organización criminal, conspiración para la distribución internacional de cocaína, conspiración para la distribución y posesión de cocaína, conspiración para la importación de cocaína y proporcionar información falsa a las autoridades.
Para los cuatro primeros cargos, se le impusieron 460 meses de prisión, mientras que el quinto cargo resultó en una sentencia de seis meses. Sin embargo, todas las penas se cumplirán de manera concurrente, lo que significa que el total de su encarcelamiento será de 460 meses, considerando también los cinco años que ya ha pasado en prisión.
Además de la larga condena, García Luna deberá pagar una multa de 2 millones de dólares. A sus 56 años, García Luna escuchó la sentencia sin mostrar emociones. Durante su gestión en el gobierno de Felipe Calderón, entre 2006 y 2012, fue el principal responsable de la seguridad pública, siendo responsable de la estrategia contra el narcotráfico.
Brian Cogan, juez encargado de la causa, al anunciar la sentencia, enfatizó la naturaleza dual de la vida de García Luna, describiéndolo como alguien que simultáneamente representaba a una familia respetable mientras actuaba como facilitador para el Cártel de Sinaloa.
«Usted dice que respeta la ley. Estoy seguro de que si le pongo el polígrafo enfrente, usted lo va a pasar, porque usted mismo se ha creído su historia. Pero es una de sus dos caras. La otra, la responsable de los delitos, existe”, expuso el juzgador.
El abogado de García Luna, César de Castro, expresó su desacuerdo con las observaciones del juez, defendiendo que su cliente ha dedicado su vida al servicio público, y no a una doble vida.
Este caso marca un hito, convirtiéndose en la condena más severa para un funcionario mexicano en Estados Unidos, sumándose a otros casos de líderes corruptos como el expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, quien fue sentenciado a 45 años por narcotráfico en junio.
La administradora de la DEA, Anne Milgram, destacó que esta sentencia envía un mensaje contundente a aquellos en posiciones de poder que colaboran con cárteles: “Ninguna influencia protegerá a los corruptos de la justicia”.
Con Información de Agencias
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