Un padre dejó que su bebé de cuatro meses fuera consumido por los gusanos, nunca le cambió el pañal.
Zachary Paul Koehn, un hombre de 29 años fue condenado a cadena perpetua debido a que estaba acusado de haber asesinado a su hijo Sterling.
Los hechos ocurrieron, en Estados Unidos, el tribunal de Iowa fue quien sentenció al padre a cadena perpetua.
El pequeño lloraba para que le cambiaran el pañal, sin embargo el padre nunca se lo quito y el bebé fue consumido por lo gusanos.
Paul Koehn llamó a los servicios de emergencia para que auxilien a su bebé pero cuando los paramédicos llegaron al domicilio encontraron, oscuridad, ya no lloraba el bebé, el cuarto carecía de luz, y el cuerpo del pequeño Sterling ya tenía gusanos.
La madre, Cheyanne Harris, de 21 años, fue acusada por el mismo delito su juicio será en enero de 2019.
No obstante, la pareja tenía otra niña de dos años pero fue llevada a un hogar provisional.
«Sobre las nueve mi novia fue a chequear al niño, y luego como a las 11 u 11:30 fue a revisar otra vez y el bebé se había ido», explica Koehn en una grabación que facilitaron los servicios de emergencias para el juicio.
Dennis Klein, el médico forense dijo que la autopsia reveló que el pequeño falleció por desnutrición, deshidratación.
Además de una infección causada por las heces fecales que había en el pañal que los padres nunca le cambiaron por lo que produjo la llegada de los gusanos y ellos terminaron con la vida del pequeño.
Al parecer el padre consumía metanfetaminas, debido a que en los expedientes médicos del pequeño se encontraron rastros de droga en su cordón umbilical.
Esta web usa cookies.