Un objeto sospechoso al interior de una maleta, que para la Policía parecía una presunta granada, obligó este miércoles a paralizar el servicio ferroviario en Madrid y Barcelona, dos principales ciudades españolas, provocando desalojos en varias estaciones. Posteriormente la policía confirmó que se trataba de una falsa alarma: la hebilla de un cinturón en forma de granada.
Luego de que un grupo de expertos en granada analizaron el equipaje de una pasajera de un tren de alta velocidad que partió de Barcelona y no encontraran ningún peligro, se levantó la alerta. Lo anterior lo informó un funcionario de la Policía Nacional española que no estaba autorizado a identificarse en medios de prensa.
«Todo vuelve a la normalidad», dijo la Policía Nacional en un breve tuit que explicó que las interrupciones del servicio en las estaciones de trenes de larga distancia y cercanías de la capital española se debían a una falsa alarma.
La detección de lo que parecía una granada en una maleta obligó a interrumpir el servicio ferroviario en las dos principales ciudades españolas.
La interrupción de los trenes en Madrid y Barcelona se produjo después de que se realizará un operativo de revisión a trenes de alta velocidad y las vías de la estación de Sans, la más importante de Barcelona, durante dicha inspección, el escáner de seguridad de la estación detectó un objeto con la forma de un posible dispositivo explosivo en el interior de una maleta, lo que obligó a evacuar a los pasajeros.
El escáner de seguridad de la estación detectó un objeto con la forma de un posible dispositivo explosivo en el interior de una maleta, lo que obligó a evacuar a los pasajeros.
Posteriormente, la imagen del equipaje escaneado fue tuiteado por la Policía de Cataluña, diciendo que el objeto sospechoso resultó ser la hebilla de un cinturón, lo que obligó a levantar la falsa alarma y que todo regresara a la normalidad.
Al cuestionar a la compañía que administra la infraestructura ferroviaria de España y supervisa la seguridad en los trenes por qué se había permitido el ingreso de un objeto sospechoso, la empresa dijo que ya ordenó una investigación para determinar quiénes no hicieron su trabajo.
Cabe recordar que en agosto del 2017 una célula extremista local mató a 16 personas en Barcelona y en una localidad turística próxima en dos ataques reivindicados más tarde por el grupo extremista Estado Islámico.
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