Un par de tiroteos ocurridos en Orlando, Florida, en el marco de las festividades de Halloween en las que se hallaban concentradas hasta cien mil personas, dejó como saldo la madrugada de este viernes dos muertos y seis personas heridas.
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Según Eric Smith, jefe de la Policía de Orlando, el primer tiroteo tuvo lugar poco después de la 1 de la madrugada en una intersección concurrida, y fue seguido por un segundo tiroteo a escasa distancia. No obstante, las circunstancias que rodean estos ataques son aún inciertas, y las autoridades están trabajando arduamente para determinar el motivo detrás de la violencia.
Derivado de estos hechos, la policía arrestó a un joven de 17 años, identificado como Jaylen Edgar, quien tiene antecedentes criminales previos. Este sospechoso ahora enfrenta serias acusaciones y podría ser juzgado como un adulto, lo que añade una dimensión más compleja a este caso. Las identidades de las víctimas, dos hombres de 19 y 25 años, aún no han sido reveladas al público.
En cuanto a los heridos, sus edades varían entre 18 y 39 años, y todos se encuentran en estado estable, según han confirmado las autoridades. El jefe Smith destacó que, a pesar de la masiva concentración de personas en el área, más de un centenar de oficiales estaban presentes en el centro de la ciudad, lo que refleja el esfuerzo de seguridad desplegado para proteger a los asistentes durante este evento festivo.
La comunidad de Orlando, conocida por su vibrante vida nocturna y su espíritu festivo, se encuentra consternada por estos incidentes violentos. Las investigaciones continúan, y se espera que la policía proporcione más detalles en las próximas horas.