La Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (FGE), ha iniciado una carpeta de investigación por el delito de homicidio, en relación con las tres personas fallecidas en la lancha naufragada la tarde de ayer en las costas de Isla Mujeres.
Funcionarios de esta dependencia de justicia, informaron que respecto a estos lamentables hechos, ya abrió la carpeta marcada con el número FGE/QROO/IS/07/98/2021 por el delito de homicidio en contra de quien resulte responsable.
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El fiscal Cristián Montenegro, dio a conocer que ya se investigan los pormenores de las responsabilidades de estas muertes, que están siendo consideradas como homicidios, por lo cual la indagatoria es en contra de quien y/o quieres resulten partícipes del hecho.
Dentro de la causal de esta investigación, se señalan la pérdida de tres vidas humanas, así como las probables lesiones que pudieran presentar dos de las personas que fueron rescatadas junto con el resto de pasajeros y trasladados a Cancún por su gravedad.
Lo que aun no se ha podido determinar con claridad, es el total de pasajeros que viajaban a bordo de la embarcación “Rosa Coral” con matrícula 2301390214-4, pues se mencionan en total 15 personas, pero no se determina si la tripulación estaría incluida en esta cifra.
Lo que se sabe, es que en efecto esta lancha pertenece a una cooperativa de paseos turísticos de Isla Mujeres, presuntamente la denominada irónicamente “Un día perfecto”, pero hasta el momento, no se ha podido localizar a sus propietarios.
En el momento de la tragedia, numerosos espectadores, incluidos varios agentes policiacos, pudieron observar como por lo menos dos de los encargados de tripular la lancha (uno sería el capitán), salieron a nado hasta la orilla, abandonando de manera negligente a los accidentados.
Una de estas personas sin embargo, no fue retenida y tras beber una botella de agua y comentar un par de palabras a un reportero, desapareció del lugar sin que hasta el momento se conozca su paradero, al igual que el de quien se dice, capitaneaba la embarcación.
Informaciones extra oficiales, detallan que en este paseo contratado por una familia del poblado de Acanceh en el vecino estado de Yucatán, no se siguieron las normas de seguridad necesarias, pues los chalecos salvavidas se encontraban almacenados y ninguno de los pasajeros lo traía puesto.
Además que, también se dice, viajaban con sobrecupo, añadido a que se menciona que el capitán causó el hundimiento al realizar una maniobra incorrecta que provocó que la lancha se “pantoqueara”, es decir, se semi hundiera, causando la muerte por inmersión de tres personas.
