Grupo Reforma recibió este martes una fuerte embestida de los candidatos a la gubernatura del PRI, PAN y Morena. Estos rechazaron participar en el debate organizado por el matutino argumentando parcialidad editorial. Su cancelación fue anunciada 15 minutos antes de iniciar el encuentro.
Es una manifestación rotunda de cambio de época. Años atrás un desaire así hubiera sido inconcebible pero el de hoy martes se organizó entre tres de los cuatro principales candidatos en tiempo récord.
Lo sucedido no obedece tanto al declive económico del grupo editor (que llega al punto de rentar instalaciones para montar bodas o cocteles), tampoco a la nueva competencia de medios nativos digitales y otras plataformas que han mermado su audiencia ya de por si lastimada por un muro de pago instalado por fuera de los parámetros del mercado.
Lo ocurrido obedece a un cambio de paradigma más profundo. Reforma fue durante décadas el grupo editor portavoz de los principales intereses económicos del país. De ese modo se distanció de sus competidores más atados a la política y la publicidad oficial. El problema es que la compañía también entró a la arena política.
Alejandro Junco Elizondo, hijo del hombre fuerte de la empresa, ha desplegado una serie de negocios asociados el sector público que no han hecho más que exponer a la empresa familiar a ese mundo del que tanto buscó escapar. El heredero se ha involucrado en temas inmobiliarios, negocios de luminarias, servicios de encuestas, entre otros asuntos. Para todo eso se requieren permisos, clientes, concesiones, en fin, herramientas que digita la política.
La primera en manifestarse fue Clara Luz Flores quien explicó mediante una carta que no asistiría porque no hay las condiciones adecuadas para que su participación sea evaluada con objetividad. A decir de la morenista, el periódico tiene una diferencia “pública y abierta” frente a las políticas y posturas de uno de los partidos que la postula.
Por su parte, Fernando Larrazabal acusó al matutino de tener una tendencia a favor de un candidato. El panista aseguró mediante una carta que siempre estará dispuesto a confrontar ideas para el Estado, pero, dijo, tiene que darse con un “piso parejo”.
“El medio de comunicación ha tenido una tendencia favorable hacia una de las opciones políticas y que esto ha sido reiterativo a lo largo de la campaña estatal”, escribió.
En tanto De la Garza se pronunció en un video colgado a redes sociales con discurso similar: “El periódico El Norte dejó de ser un medio imparcial para convertirse en un grupo que lo que hace es manipular y controlar intereses políticos”.
El priista quien ha sido de los más criticados por el periódico El Norte, señaló que, el diario que dirige Alejandro Junco de la Vega ha modificado encuestas y apoyado abiertamente a los candidatos que ellos desean. Incluso recordó como en 2015 apoyaron a “El Bronco”.
“Hace seis años apoyaron a un candidato y ahora se deslindan del desastre que ocasionaron en nuestro Estado. Hoy el escenario se repite sin ninguna ética profesional, mienten sistemáticamente a los ciudadanos que aún creen en sus publicaciones”, indicó.
Pese a la inasistencia de los candidatos y candidata, El Norte anunció que el Foro continuaría respetando los tiempos ya establecidos. Sólo el candidato de Movimiento Ciudadano, Samuel García acudió.
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