Como ya había ocurrido antes en otras desgracias de esta magnitud, tras el paso devastador huracán Otis por el puerto de Acapulco, pobladores del lugar desataron una oleada de rapiña que afectó a prácticamente la totalidad de tiendas y supermercados de este lugar.
Todo lo que quedó en los establecimientos comerciales después del azote del huracán, fue saqueado por la población, ante la total omisión de autoridades de los tyres niveles de gobierno.
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Pues a pesar de la importante presencia de decenas de patrullas de distintas corporaciones que circulan por todo el estado y la ciudad debido al desastre, ningun uniformado trató de impedir los hurtos.
Así, mientras las autoridades centran sus esfuerzos en movilizar a los guerrerenses de un punto a otro dentro del estado, los temas de seguridad han sido totalmente abandonados.
Imagenes difundidas a través de las redes sociales, exhiben como por las calles de Acapulco y varias ciudades de Guerrero es posible ver a personas cargando mercancías robadas o con carritos de supermercado llenos de objetos sustraídos de negocios como Liverpool, Walmart, Superama, Oxxo, o Mr. Frogs.
La nula prevención de esta situación por parte de las autoridades, recuerda a la ocurrida en el 2005 cuando el huracán Wilma arrasó con la también turística ciudad de Cancún, desatando una rapiña similar-
En medio del caos por le huracán Otis, se desata la rapiña en Acapulco
Con Información de Agencias