Estadounidenses vinieron a México a vivir el Día de Muertos, y murieron

Aunque las muertes de un grupo de tres amigos estadounidenses ocurrió desde el pasado 30 de abril, fue hasta ahora que trascendieron, los extranjeros habían venido a México a vivir las tradiciones del Día de Muertos, alquilaron una casa a través de la plataforma Airbnb, y allí murieron.

Los tres turistas, dos hombres y una mujer, fueron hallados sin vida al interior de un inmueble ubicado en la colonia La Rosita, en la Alcaldía Cuajimalpa de la Ciudad de México, de acuerdo a la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México, murieron intoxicados por gas.

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Identificados como Jordan Marshall y Kandace Florance, ambos de 28 años de edad, así como Courtez Hall de 33 años, conocido de Marshall, los jóvenes se encontraban de visita en la capital mexicana desde el 28 de octubre para presenciar las festividades del Día de Muertos, de acuerdo con los primeros reportes.

El 30 de octubre fueron localizados por guardias de seguridad del condominio residencial en donde se hospedaban, quienes al percatarse de los hechos solicitaron el apoyo de elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, que a su vez solicitaron la presencia de paramédicos, los cuales confirmaron el deceso de los extranjeros.

Por estas muertes, la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México inició una carpeta de investigación el pasado 30 de octubre, en la que señaló que los tres estadounidense habrían muerto por la inhalación de gas al interior del inmueble, sin embargo, esta versión no dejó conforme a los familiares de las víctimas.

El diario El País señaló que, antes de arribar a departamento que habían rentado, y por lo tanto antes de su deceso, Florance se comunicó con su pareja sentimental identificado como Victor Day, a quien le manifestó que estaba presentando malestares físicos luego de salir de un bar y antes de llegar a departamento.

Durante una entrevista que realizó el medio informativo al novio de la joven turista, él relató que aproximadamente a las 3:00 horas de la madrugada del domingo 30 de octubre recibió diversos mensajes de Kandace en los que ésta le informó que no se sentía bien, que estaba extremadamente cansada, pero aseguró que no había tomado nada ilegal.

Mientras conversaban, ella le dijo que había llegado al departamento, pero que continuaba sintiéndose mal. Incluso, Day detalló que a través de una videollamada fue testigo de cómo Florance vomitó, por lo que le preguntó si en algún momento descuidó lo que estaba bebiendo, ya que consideró que alguien pudo poner alguna droga en la bebida de su novia.

Victor se fue a descansar al finalizar la llamada y supuso que su novia haría lo mismo, y que ello le ayudaría a Kandace a recuperarse. Durante la mañana del domingo el joven intentó comunicarse con su pareja, pero no hubo respuesta alguna, por lo que intentó localizar a Jordan, pero al no lograrlo decidió buscar a la anfitriona del Airbnb para ponerla al tanto de la situación.

Por lo cual fue precisamente la dueña de la casa en renta la que solicitó a los guardias del edificio que revisaran el departamento, y quien se comunicó de nuevo con Day para informarle que los tres turistas fueron encontrados sin vida al interior del inmueble, que se localiza a unas calles de Lomas de Santa Fe.

El resultado de la investigación que hizo la Fiscalía capitalina, no convenció a los familiares de las víctimas y surgieron varios cuestionamientos. Por ejemplo, Day señaló de manera enfática los malestares que sufrió su novia cuando se dirigía al departamento, así como el hecho de que no se activaron los sensores cuando se presentó la fuga de gas.

Por su parte, según información consignada por el portal Wavy, Jennifer Marshall, madre de Jordan Marshall, expresó que aún no tiene certeza de las causas que provocaron la muerte de su hijo, ya que, refirió, Kandace tuvo comunicación con su novio, a quien le expresó que se sentía mal luego de acudir a un bar, del que desconocen el nombre y la ubicación.

A esto, agregó la mujer, se sumó el hecho de que las autoridades de México no han detallado información sobre el caso, lo que también se complicó porque cuando llegaron a territorio mexicano no había traductores que los ayudaran, según señaló el mismo portal.

“(Se) inició el pasado 30 de octubre una carpeta de investigación por la muerte de tres personas extranjeras, derivado de una posible intoxicación por inhalación de gas en el interior de un departamento de la colonia La Rosita, Alcaldía Cuajimalpa de Morelos”, indicó Fiscalía de la Ciudad de México en un informe.

Los cuerpos de los tres jóvenes, de acuerdo con el medio estadounidense Wavy, ya fueron reclamados por sus familiares, quienes residen en los estados de Virginia y Nueva Orleans, en donde también radicaban Kandace, quien contaba con un negocio de velas, Jordan y Courtez, ambos dedicados a la docencia en Estados Unidos.

Por su parte, las autoridades estadounidenses no se han pronunciado al respecto del caso, argumentando que están a la espera de más información, no obstante, aseguraron que siguen de cerca las investigaciones sobre el mismo.

Apenas el pasado 4 de noviembre se dio a conocer que se inició una campaña en a través del sitio South Bay con el fin de ayudar a una familia que perdió a tres de sus integrantes durante su estancia en la Ciudad de México, a donde acudieron a observaban una práctica de Fórmula Uno.

Las Víctimas fueron tres hermanos, que vivían en Tijuana, Baja California y Los Ángeles, Estados Unidos, quienes perdieron la vida, también, al interior de un departamento que rentaron mientras dormían.

De acuerdo con información del portal ABC 10Noticias, tras llegar al inmueble se sintieron mal por lo que acudieron al médico, el cual les diagnosticó agotamiento por calor, por lo que al regresar al departamento se dispusieron a dormir.

Al día siguiente, Angélica, de 29 años de edad, fue encontrada muerta por su hermano Marco, quien junto con su otra hermana, identificada como Andrea, estuvo hospitalizado durante cuatro días en estado crítico. El diagnóstico de las muertes fue por intoxicación con monóxido de carbono.