“Gracias por ser y estar”, fue el último mensaje que envió a sus conocidos Christian Leif, un chef de la Ciudad de México que se fue a vivir y a trabajar a Guadalajara, pero un fin de semana decidió dar un paseo por Mazamitla, Jalisco, de donde nunca regresó, lo secuestraron y luego lo asesinaron.
Su cuerpo fue encontrado junto al de otros dos hombres y aunque sin prueba alguna el gobernador Enrique Alfaro se apresuró a decir que los tres eran delincuentes, hoy se sabe que Christian era chef y un grupo de sujetos armados lo privó de la libertad y de la vida.
El sábado 30 de abril, Christian se separó del grupo de amigos con el que viajaba para volver a Guadalajara en autobús, pero fue secuestrado.
Sin embargo, el domingo logró enviar mensajes de auxilio desde su teléfono.
Les informó a sus seres queridos que lo habían secuestrado cerca de las letras que dicen Mazamitla. “Van tres trocas que me cambian”, refirió
El 1 de mayo –fecha en que envió su último audio vía WhatsApp-, ocurrieron los tiroteos y bloqueos carreteros que causaron pánico en cientos de turistas en Mazamitla, y el chef de 41 años fue localizado muerto.
Mientras estuvo secuestrado, sus familiares y seres queridos lo reportaron como desaparecido, pero un operador de Locatel les dijo que solo lo podían considerar como incomunicado.
‘Gracias por ser y estar’, últimas palabras de chef asesinado en Jalisco
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