Lamenta AMLO desplome del techo en iglesia en Tamaulipas

El presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó la muerte de 10 personas este domingo, por el desplome del techo de una iglesia en donde se celebraba bautizos comunales, en Ciudad Madero, Tamaulipas.

“Mucha solidaridad de la gente, además de los apoyos de Protección Civil, de la autoridades locales, estatales y federales”, expresó López Obrador en su conferencia mañanera de este martes 2 de octubre en Palacio Nacional.

En el Salón Tesorería, López Obrador también lamentó la muerte en Chiapas de 10 mujeres migrantes originarias de Cuba.

“Por eso vamos a seguir insistiendo en que se deben atender las causas de la migración, ir al fondo y ya dejar la politiquería, pensar que los derechos humanos están por encima de las ideologías.

“Que no se pueden mantener sanciones, bloqueos y que se tiene que ayudar a los países con más pobreza. Tiene que haber fraternidad universal”, expresó López Obrador al acusar una “mafia” de traficantes de personas.

Ayer, al menos 10 personas murieron (dos de ellas menores de edad) al desplomarse ayer por la tarde el techo del templo católico Santa Cruz, en la colonia Unidad Nacional, ubicada en la cabecera municipal de Ciudad Madero, en el sur de Tamaulipas, informó el gobernador Américo Villarreal.

Además, 40 ciudadanos resultaron con lesiones de distinta magnitud y fueron llevadas a varios hospitales. Al cierre de la edición varias personas seguían atrapadas y las labores de rescate se habían prolongado casi siete horas.

Videos tomados por cámaras de seguridad particulares muestran que la techumbre de la parroquia, de estilo arquitectónico industrial, se derrumbó a las 14:18 horas mientras se realizaba un bautizo.

En respuesta, la Secretaria de la Defensa Nacional aplicó el Plan DN-III-E para la búsqueda de personas y asignó binomios caninos. La agencia AFP divulgó que el gobierno estatal, encabezado por el morenista Américo Villarreal Anaya, atribuyó la tragedia a fallas estructurales en el inmueble.

En fotografías publicadas por medios locales se aprecia que la iglesia era una estructura de concreto y ladrillo; el techo parecía estar construido de hormigón.

En imágenes que distribuyeron autoridades estatales se observa que la techumbre cayó sobre partes del templo, lo que permitió que hubiera huecos donde pudiera haber sobrevivientes.

Unidades de la Guardia Nacional, de la policía estatal, de la Coordinación de Protección Civil del estado y de la Cruz Roja se encuentran en el lugar para buscar posibles víctimas, informó la policía de Tamaulipas.

En tanto, Villarreal Anaya ordenó al secretario de Salud, Joel Hernández Navarro, y al secretario general de Gobierno, Héctor Joel Villegas González, que se dirigieran a Ciudad Madero para coordinar las maniobras de rescate, y envío un mensaje de solidaridad a las familias que perdieron a alguno de sus integrantes en el accidente.

Hernández Navarro y Villegas González tuvieron una reunión de trabajo emergente en las inmediaciones del lugar siniestrado para organizar equipos de auxilio y cuadrillas de trabajo y recuperar a las víctimas.

En las tareas de rescate participaron ciudadanos voluntarios, elementos de Protección Civil, personal de la Comisión Federal de Electricidad, militares adscritos a de la 48 Zona Militar y de la Secretaría de Marina, al igual que de la Guardia Nacional y de la Guardia Estatal.

Al cierre de la edición no se había ofrecido una relación completa de los heridos y únicamente se divulgó que fueron hospitalizados Michele García Cruz, de 13 años; María Guadalupe Bravo Rangel, de 77; Iván García Alemán (30), Leticia García Bravo (50), Denisse Murillo (41), Gabriel González (43) y Diego Martínez, de cinco años.

José Armando Álvarez Cano, obispo de Tampico –localidad conurbada a Ciudad Madero– acudió al sitio de la tragedia. El jerarca católico dio a conocer en redes sociales que al momento en que la estructura cayó se celebraba un bautizo.

Nuestra solidaridad y oraciones por los fallecidos y sus familias, así como por aquellos que se encuentran atrapados y heridos. Rogamos a Dios para que les conceda pronta recuperación y consuelo, acotó la Conferencia del Episcopado Mexicano en un boletín.