En la madrugada, un incendio acabó con la vida de siete niños que dormían tranquilamente en su casa de madera, cartón y lámina en la alcaldía Iztapalapa.
Los cuerpos de los menores fueron sacados por los bomberos. Los niños fueron reconocidos por Elizabeth, que es la madre de cinco de ellos y tía de uno más; eran Óscar y Diego, de dos años; Jimena, de cuatro; Adriana, de seis; Marlene, de nueve, y Miguel Ángel, de trece. El séptimo niño, de acuerdo con datos preliminares, pertenece igual a la familia, presuntamente de un medio hermano.
Los bomberos se dirigieron a la casa incendiada, que está a ocho minutos del Hospital General de Iztapalapa; pero no pudieron llegar a tiempo para poder rescatar a los siete menores, que fueron consumidos por el incendio.
“Eran muy flaquitos, con las ropas sucias, no iban a la escuela. No sabíamos sus nombres, pero sí los veíamos”, dijo Araceli, quien es una vecina del lugar.
La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum , informó que las primeras versiones dicen que encendieron una fogata en el interior de la casa, por lo que se incendió al ser de madera; sin embargo, un policía comentó que la familia solía encender papeles para ahuyentar a los mosquitos.
Los vecinos denunciaron que los niños estaban abandonados. Eva afirmó que alimentaba a los más pequeños “Es una triste historia, desafortunadamente tienen que pasar cosas para que todo mundo venga”.
Según Eva, una vez logró entrar en la casa, “Entrabas y basura por aquí y por allá”, la mujer declaró que cuando nació el menor se lo comían las chinches.
Los siete niños fueron velados, en una vivienda de la colonia Santa Cruz Meyehualco, en la alcaldía Iztapalapa.
En sus ataúdes se colocaron sus nombres: Cruz, Oscar, Marlén, Miguel, Adriana, Jimena y Diego, los siete murieron a causa de un incendio.
Esta web usa cookies.