La sorpresiva decisión del Departamento de Justicia de Estados Unidos de retirar todos los cargos contra el general Salvador Cienfuegos, anunciando ayer que dejará el caso de manos de la Fiscalía General de la República que se comprometió a continuar la investigación por los delitos de narcotráfico y lavado de dinero, fue previsiblemente el tema central de la mañanera de este miércoles, comandada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador junto al canciller Marcelo Ebrard.
El presidente celebró el accionar del gobierno de EU, dijo que no había nada “oculto” en el acuerdo entre la agencia liderada por William Barr y su par mexicano Alejandro Gertz Manero, y aseguró que si la investigación corrobora que es culpable, “no habrá impunidad”.
“Miren, no hay nada oculto, nosotros actuamos a partir de principios y lo que se hizo en este caso fue intervenir en materia política, diplomática, para expresar nuestra inconformidad ante un hecho que se presenta y deciden juzgar en Estados Unidos, sin conocimiento de nuestro gobierno”, expresó, aludiendo a las especulaciones que se desataron ayer tras conocerse la noticia, apuntando a un posible “regalo” de la administración Trump luego que el presidente se negara a reconocer el triunfo de Biden diciendo que el resultado todavía no había sido oficializado.
El mandatario pareció hacerse eco de la explicación del Departamento de Justicia que argumentó que por “razones de política exterior” solicitarían a la jueza de la causa en Estados Unidos que el proceso contra el exsecretario de Defensa de Peña Nieto sea llevado en México.
“Esto va más allá de lo legal. No quiere decir que no sea legal, pero es que existe un acuerdo de colaboración suscrito años atrás en esta materia, y no se hizo valer. En el caso que nos atañe, fue violado, porque nosotros no teníamos ninguna información”, dijo en referencia a la investigación de la DEA contra el ex funcionario mexicano.
López Obrador aseguró que la inminente extradición de Cienfuegos “no significa impunidad” como muchos temen, dada la cercanía del presidente con las fuerzas armadas y el deficiente historial de la justicia mexicana contra la delincuencia organizada.
“Significa que se inicia una investigación que ya comenzó a partir de que nos envían los elementos de prueba, la cancillería entrega primero de manera informal a la Fiscalía. Lo que nos entregan y luego ya formalmente se recibe y la Fiscalía abre una investigación con esos elementos”, explicó.
Además, agradeció al gobierno de Estados Unidos por escuchar el planteamiento de su gobierno sobre cómo en el arresto a Cienfuegos, detenido el pasado 15 de octubre en el aeropuerto de Los Ángeles, no se había “cuidado el proceso”. “Lo rectificaron”, dijo el mandatario, quien añadió que México no era “colonia ni protectorado” como para actuar de esa manera.
Además, dijo que el gobierno hubiese hecho lo mismo con cualquier ciudadano mexicano, aunque admitió que en el caso del ex secretario de Defensa “está de por medio el prestigio de una institución como las Fuerzas Armadas”.
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Esta entrada fue modificada por última vez en jueves, 16 de marzo, 2023
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