Al dar a conocer un informe sobre lo ocurrido con los apagones registrados entre el 7 y 9 de mayo, el director de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett sostuvo que “nunca ha estado en riesgo el sistema eléctrico nacional. Nos entregaron a una CFE a punto de desaparecer por la falta de inversión. Se emprendió el rescate de la empresa más importante del país”.
Aunque afirmó que el sistema operó todo el día, pero con el pico de la demanda (producto de un incremento por el calor) reconoció que “hubo un problema de incapacidad para atacarla por lo que se requirieron ciertos cortes de electricidad que duraron una hora, pero el sistema eléctrico funcionó y se recuperó. Estamos ya con la seguridad de contar con un sistema eléctrico más fuerte que nunca”.
Durante la conferencia presidencial, Bartlett afirmó que “el sistema eléctrico no entró en crisis, nunca estuvo en peligro, no hubo daños a la industria y comercio más que en periodos de una hora. Se provocó en toda América. Texas mando una advertencia por ese crecimiento inadvertido de calor, fue atendido, en estos tres días las máquinas por el verano que se adelantó tres meses”.
El director de Planeación de la CFE, Juan Antonio Fernández aseveró que la capacidad instalada de generación de energía eléctrica es de 80 mil megawatts cuando la demanda pico extraordinaria y atípica, son 50 mil megawatts. Hay capacidad suficiente para atender la demanda generada por la CFE, en 49 por ciento, 19 por ciento de productores independientes que le venden la energía a la CFE y el resto por empresas privadas.
Explicó que en esos tres días hubo una importante ola de calor que incremento, en promedio nacional, 1.4 grados centígrados de temperatura en todo el país por lo que eso provocó que la demanda de electricidad se incrementara a valores de verano. “En el año, tenemos la mayor exigencia por altas temperaturas, la demanda máxima se adelantó seis semanas. Imprevista. Que tanto impacto, incremento de demanda fue de 13 por ciento”.
En paralelo, tal como estaba planeado, algunas unidades generadoras de la CFE estaban en proceso de mantenimiento, se privilegiaron las de menor demanda para mantenimiento y estén disponibles para verano, donde aumentan temperaturas.
Fernández dijo que ante el incremento inusual de la demanda se requería equilibrar entre demanda y generación por lo que se ejecuta esta reducción en la generación para tener control del sistema eléctrico evitar mayor perturbación, se reduce la generación y con ello se limita el impacto de este disturbio.
Según dijo el determinar que la suspensión del servicio es un mecanismo que se utiliza en el mundo, sobre todo los que tienen sistema ínter conectado. “Se selecciona entre generación y demanda no se afectan de manera simultánea sino bloque por bloque, los primeros en salir se restauran, evitar afectaciones por tiempos prolongados por lo que los periodos de suspensión de servicio fueron en promedio fueron de treinta minutos”.
Señaló que en estos tres días de afectación fue al cinco por ciento de usuarios. Si tenemos 49 millones en el país, se acercó a dos y medio millones de usuarios afectados. Pero en el 95 o 97 por ciento del tiempo tuvimos disponibilidad total. En el año se han interrumpido seis horas, por lo que prácticamente ha habido energía 24 horas de todos los días, con una suficiencia total 99.98 por ciento. No solo es indicador de alta capacidad. Las interrupciones en ese periodo solo afectaron al cinco por ciento de usuarios.
En su oportunidad, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que es necesario combatir la desinformación para que no haya motivo de alarmas y evitar el sensacionalismo. Señaló que en esos tres días se tuvieron que hacer algunos cortes para proteger el sistema eléctrico nacional.
A su vez, Alejandro López, subdirector de Contratación y Servicios destacó que la inversión en el sector eléctrico no ha tenido precedentes recientes destacando que en este sexenio la inversión pública ha sido de 19 mil 971 millones de dólares: 4 mil 600 millones de dólares para ejecutar obras para incrementar la transmisión de energía; 9 mil 171 millones de dólares en proyectos de generación y 6 mil 220 millones de dólares en la adquisición de plantas a Iberdrola.
Respecto a las interrupciones del servicio que ocurrieron del 7 al 9 de mayo, el director de Planeación Estratégica de la CFE, Juan Antonio Fernández Correa, explicó fue un efecto importante por la presencia de una “ola de calor, que desplazó el promedio de temperatura a nivel nacional 1.4 grados centígrados», lo que provocó que “la demanda de electricidad en el periodo nocturno se incremente a valores que esperábamos durante los meses de verano”.
Juan Antonio Fernández Correa destacó que durante el 7, 8 y 9 de mayo hubo interrupciones rotativas del suministro de energía eléctrica, que afectaron “como máximo al 5% de la población”. Sin embargo, “al día de hoy llevamos ya 6 días sin interrupciones atendiendo condiciones de demanda similares a las que existieron entre los días 7 y 9 de mayo” y reiteró que “no existe una crisis eléctrica en el país”.
Fernández Correa explicó que el Sistema Eléctrico Nacional tiene una capacidad total de 87 mil 275 megawatts, y que la “demanda pico que hemos tenido de forma extraordinaria y atípica […] ha alcanzado valores cercanos a los 50 mil megawatts”, por lo que “tenemos capacidad suficiente para atender todos los requisitos que la población y el país demandan”.
Por su parte, el director de Planeación y Operación del Sistema Eléctrico Nacional, Mauricio Cuéllar Ahumada, explicó que en la planeación que se realiza se había determinado que “ciertos equipos estuvieran en mantenimiento en estas semanas. Sin embargo, hubo una ola de calor y se incrementó la necesidad de esos equipos”.
Además, el director de Planeación y Operación del Sistema Eléctrico Nacional explicó que “hay momentos en el que si no nos alcanza toda la generación [de energía eléctrica] que está considerada, la única forma de hacer el balance es disminuyendo la demanda, es decir, afectando usuarios de energía eléctrica”, pues “dentro de las reglas normativas y análisis que hacemos, hay un 6% de reserva que tenemos en todo momento”.
Mauricio Cuéllar Ahumada expuso la línea de tiempo de los eventos del 7,8 y 9 de mayo, en los que se presentó la interrupción del servicio eléctrico.
El director del Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), Ricardo Octavio Mota Palomino, explicó que el organismo a su cargo “tiene la responsabilidad de garantizar el suministro de energía eléctrica echando mano de todos los recursos con los que se cuenta y todos los días recibimos la información de la CFE de los diversos agentes privados que participan en el mercado mexicano y somos los responsables de garantizar la seguridad del Sistema Eléctrico Nacional”, por lo que “tenemos la responsabilidad de determinar cómo mantener los balances entre la variación de la carga y la disponibilidad de la generación y, cuando prevemos algún problema potencial podemos notificar que hay alguna alerta”.
Ricardo Octavio Mota Palomino informó que el Cenace es el responsable de operar el Mercado Eléctrico de México, donde aproximadamente se hacen transacciones de energía entre entes privados y entes de gobierno por alrededor de 1 mil 750 millones de pesos diarios, también administra “los accesos de nuevas plantas y de nuevos centros de consumo teniendo en cuenta el desarrollo del sistema y tratando de evitar perjuicios con la gente que ya está recibiendo el servicio eléctrico”, además de “realizar la planificación de la ampliación de las redes de transmisión y las redes generales de distribución que tienen impacto en el mercado eléctrico”.
En cuanto al funcionamiento en general del Sistema Eléctrico Nacional, la generación de la energía nacional corresponde en un 49% a la CFE, 19% a las Centrales de Productores Independientes de Energía y 32% a productores privados. Además, de todo el Sistema Eléctrico Nacional, el 35% funciona con energías limpias y de éstas, el 18% es de capacidad intermitente. Fernández Correa detalló que los 14 mil megawatts de producción de energía eléctrica fotovoltaica y eólica tienen que ser sustituidos en el momento de mayor demanda de energía, pues por la noche no están disponibles.
Por su parte, el director del Cenace, Ricardo Octavio Mota Palomino, expuso que México tiene una capacidad de producción de energía eléctrica que “es después de Brasil, la más grande de Latinoamérica”. Además, Mota Palomino explicó que las zonas donde hay más demanda de energía eléctrica son la Zona Metropolitana de la Ciudad de México y la de Monterrey, mientras que hay presión en el sistema eléctrico por el crecimiento en la península de Baja California, en la península de Yucatán y en la zona del Bajío.
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