Se llama “Sociedad Civil México” y su momento cumbre fue el 11 de febrero de este año, cuando 64 mil usuarios de Twitter impulsaron la tendencia #TodosSomosLoret para defender al periodista Carlos Loret de Mola tras ser expuesto por el Presidente Andrés Manuel López Obrador por sus ingresos, pero tres meses antes de ese “mitin digital” en Space había difundido una amplia charla con el magnate Claudio X. González, creador de la coalición Va por México.
Este grupo, que opera a través de las redes sociales, se ostenta como representante de la sociedad civil de México, pero su fundadora, Ana Lucía Medina Galindo, esconde que es una militante formal del Partido Acción Nacional (PAN) desde 2005, diputada local de Michoacán, entre ese año y 2008, y candidata a esa misma posición en 2011, cuando Marko Cortés, su actual presidente, buscó ser alcalde de Morelia.
Medina Galindo tiene la misma característica de los principales dirigentes de las organizaciones Frente Cívico Nacional, Sí por México, Unidos por México, Causa en Común y Poder Ciudadano que, como representantes de la “sociedad civil”, acudieron el martes 20 al Senado para oponerse a la reforma sobre la Guardia Nacional, encabezados por Claudio X. González: Son políticos reciclados de PAN, PRI y PRD, y exfuncionarios de esos partidos.
En el caso de Medina Galindo, quien leyó en el Senado el comunicado a nombres de las organizaciones de la “sociedad civil”, su filiación y relaciones políticas acreditan una biografía totalmente panista: diputada local en Michoacán, hizo campaña para volver a serlo junto con Luisa María Calderón, quien aspiraba a la gubernatura de Michoacán, en 2011, cuando el titular del Ejecutivo era Felipe Calderón Hinojosa.
Postulada por el PAN y el Partido Nueva Alianza (Panal), de Elba Esther Gordillo, la fundadora de “Sociedad Civil México” ostentó su carácter panista en fotografías y videos, posando como candidata a diputada por el distrito 11 de Morelia con personajes de la talla de Javier Lozano Alarcón y Ernesto Cordero, así como Josefina Vázquez Mota, Santiago Creel y Marko Cortés.
Aliados de las peores causas, lo único que les interesa es el bien propio y el de sus familias. Ana Lucía Medina Galindo (al centro cargando a su hijo) en su cierre de campaña en noviembre de 2011 junto a Josefina Vázquez Mota, Luisa María Calderón, Marko Cortés y Santiago Creel.
Después de haber sido vencida en esa elección por el PRI, que también derrotó a la hermana de Calderón y a Cortés, Medina Galindo siguió militando en el PAN, pero luego incursionó en la “sociedad civil” con el membrete “Sociedad Civil México”.
Es el mismo caso del membrete Unidos por México, que supuestamente es una organización de la sociedad civil, pero está integrada sólo por exgobernadores del PAN, uno de los cuales, Marco Antonio Adame Castillo, también hizo uso de la palabra en el Senado, sin aclarar que es diputado federal de ese mismo partido político.
El 29 de septiembre de 2020 nació Unidos por México y sus integrantes son además de Adame Castillo, exgobernador de Morelos y uno de los operadores políticos de la organización secreta El Yunque, integran este membrete Ernesto Ruffo, Carlos Medina Plascencia, Francisco Barrio, Alberto Cárdenas, Fernando Canales Clariond, Eugenio Elorduy, Patricio Patrón, Francisco Ramírez Acuña y Juan Carlos Romero Hicks, aspirante a candidato presidencial en 2024.
Ana Lucía Medina Galindo acudió el martes 20 de septiembre al Senado para oponerse a la reforma sobre la Guardia Nacional; en la misma imagen supervisando el acto y los discursos el magnate Claudio X. González.
El Frente Cívico Nacional es otra chapuza: Creado el 2 de julio de este año, los dirigentes de este membrete son el perredista Guadalupe Acosta Naranjo, Demetrio Sodi y Carlos Navarrete, así como la priista Rosario Guerra, el panista Gustavo Madero, la excandidata presidencial petista Cecilia Soto y Emilio Álvarez Icaza, senador postulado por el PAN.
Sí por México es liderado por Claudio X. González y Gustavo de Hoyos, quienes articularon la coalición Va por México, integrada por PRI-PAN-PRD, en cuyas primeras reuniones en el domicilio del primero participaron también dirigentes del partido Movimiento Ciudadano y México Libre, del expresidente Calderón.
A Sí por México la integran, según sus promotores, 534 organizaciones y más de 50 mil afiliados, aunque sus dirigentes, además de Claudio X. González y De Hoyos, van desde Beatriz Pagés Rebollar, exdiputada federal del PRI y directora de la revista Siempre, hasta Guillermo Velasco Arzac, uno de los jefes nacionales de la organización ultraderechista El Yunque.
Ana Lucia Medina Galindo, aparentando lo que no son, defensoras de la causa ciudadana, al lado de sus compañeras de partido quienes también solo son simuladoras y el tiempo las desenmascara; lo único que les interesa es el presupuesto que hoy ya no se otorga a las llamadas “organizaciones civiles”.
Uno de los más recientes fichajes de Sí por México es Juan Pablo Beltrán Viggiano, hijo de la secretaria general del PRI, Carolina Viggiano, derrotada como candidata a gobernadora de Hidalgo, quien fue designado por Claudio X. González como presidente de su agrupación en ese estado.
Causa en Común, creada en el Gobierno de Calderón, es presidida por María Elena Morera, amiga de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública preso por narcotráfico en estados Unidos, cuyo coordinador de asesores del exfuncionario, José Antonio Polo Oteyza, es director general de esa agrupación.
Poder Ciudadano, que también suscribió en el Senado el documento contra la reforma para ampliar el periodo constitucional de las Fuerzas Armadas en la Guardia Nacional es un membrete que pertenece a Sí por México, pero asegura que sus integrantes se encuentran en cada uno de los 300 distritos electorales del país…
Con información de Álvaro Delgado Gómez para https://www.sinembargo.mx/26-09-2022/4258352
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