El Presidente Andrés Manuel López Obrador, nuevamente “da un hit”, al no sólo dotar de agua a Nuevo León, sino que de paso frustra los planes de privatización de la red del vital líquido que tenía en puerta el gobernador Samuel García.
López Obrador informó esta mañana de la firma de un decreto para formalizar apoyos para el combate de la escasez de agua que actualmente azota a Nuevo León.
De acuerdo con el mandatario, se van a reforzar los apoyos que ya existen, además de llevar a cabo algunas medidas adicionales. El decreto busca “resolver el fondo a mediano y a largo plazo el problema, y reforzar acciones de inmediato”.
El decreto incluye el financiamiento de un acueducto y la ampliación de presas y distribución, ésta última a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), a través del Plan DN-IIIE.
“Las soluciones que nosotros estamos proponiendo y se van a llevar a cabo con el apoyo del Gobierno del estado y con el apoyo de los gobiernos municipales, nos van a permitir seguir trabajando hacia adelante, pero vamos a poder garantizar agua ocho o 10 años hacia adelante, y ya vienen otras autoridades para que se continúe invirtiendo y se amplíe el plazo”, dijo López Obrador.
“Nos comprometemos a que antes de que termine este Gobierno se tenga abasto de agua para ocho o 10 años hacia adelante, empezando ahora con este plan de reforzamiento”.
El decreto se publicará a mediodía, adelantó el Presidente. “Estamos trabajando con el gobernador de Nuevo León [Samuel García] de manera coordinada, con presidentes municipales. Nos han ayudado los empresarios, que están destinando agua concesionada para el uso doméstico, los agricultores…”, precisó.
Por su parte, el ingeniero Germán Arturo Martínez Santoyo, director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), expuso el reforzamiento de las acciones que el Gobierno federal ya ejecuta para esta problemática, enfocadas en cinco actividades principales: el financiamiento del acueducto El Cuchillo II y de la Presa La Libertad, la conexión del canal Chapotal al acueducto Cuchillo I, apoyo mediante suministro de carros-tanques y otros, así como el decreto presidencial.
“A finales de 2023 el financiamiento del acueducto El Cuchillo va a ser una realidad”, dijo el funcionario.
“La Presa Libertad va a aportar poco más de mil 500 litros por segundo. Esta es una presa que va a terminarse también en el año 2023”, señaló Martínez Santoyo en conferencia de prensa.
Otra de las acciones más importantes para atender la emergencia inmediata en la Zona Metropolitana de Nuevo León es un acuerdo establecido con la zona agrícola citrícola, cercana a Monterrey, para la aportación de agua de hasta mil litros por segundo, explicó el director de Conagua.
De igual forma, la Sedena apoyará adicionalmente con 100 pipas como parte del programa DN-IIIE, que actualmente ya aporta 48 para abastecer a las zonas más desprotegidas.
Además, el mandatario detalló que el faltante es de unos tres mil litros de agua por segundo, aproximadamente. “Con estas acciones, se logran de mil a mil 500 litros por segundo: con la reparación de pozos, el canal de riego, la aportación de la industria, pero de todos modos hay déficit, mientras no llueva, y va a llevar tiempo”, dijo.
El Gobierno de AMLO tiene planeado terminar en un año y medio “a más tardar” el acueducto de la presa El Cuchillo y, con la aportación de la presa Libertad, “que debe quedar concluida antes de que termine” su Administración, el estado tendría hasta cinco mil litros por hora “y ya se puede pensar en el mediano y largo plazos”.
“Hay que pensar en desarrollo, no estar pensando en dejar todo al mercado y diluir al Estado. No queremos islas en el país rodeadas de pobreza, con zonas de crecimiento y otras con abandono y marginación, que fue lo que sucedió durante el periodo neoliberal”, argumentó López Obrador.
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