El presidente Andrés Manuel López Obrador reveló que el costo del avión presidencial, que se vendió al gobierno de Tayikistán, perdió valor por una falla de origen y por la depreciación que sufrió la aeronave por el paso del tiempo.
En la conferencia de prensa matutina, desde el Museo Naval en Veracruz, el mandatario dijo estar contento por lograr la venta del avión, la cual se concretó en mil 658 millones de pesos que ya están en las cuentas del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado.
“Estamos contentos porque se vendió el ostentoso avión presidencial, (…) no es un avión construido en serie, desde luego es un avión que no podía utilizarse en nuestro país porque técnicamente debe volar en distancias largas, cinco horas en promedio. Y nuestro territorio en ese avión se puede recorrer en menos tiempo, ni siquiera la frontera, puede ser que de frontera a frontera.
“Cada día se depreciaba y tuvo también una falla de origen en la fabricación que salió desde el primer avalúo y eso le bajó el precio y fue creciendo también ese desperfecto, pero bueno, el último avalúo que se realizó fue de mil 658 millones.
“Se atrevieron a ponerle el nombre de José María Morelos y Pavón, imagínense, cuando Morelos luchó por la igualdad”, reveló.
López Obrador instruyó al titular de Banobras, Jorge Mendoza, presentar un reporte la próxima semana de todas las aeronaves que el gobierno ha vendido, que en total, calculó López Obrador, suman una decena.
Consideró que es importante seguir hablando de este tema porque estos aviones significaron un gasto muy oneroso para el gobierno a lo largo de los años.
“Estamos contentos porque se vendió el ostentoso avión presidencial, este avión lo compró Calderón aunque él no lo usó, se lo dejó comprado al licenciado Peña Nieto, al final del gobierno de Calderón tomaron la decisión de comprar este avión que lo mandaron a hacer especial, no es un avión construido en serie, desde luego es un avión que no podía utilizarse en nuestro país”, agregó.
En el anuncio por la venta del avión presidencial participaron el titular de la Sedena, Luis Cresencio Sandoval González (primero a la izquierda), el director general del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), Jorge Mendoza Sánchez, (segundo al centro), el Presidente, Andrés Manuel López Obrador y el director del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, Ernesto Prieto Ortega, (a la extrema derecha).
El mandatario federal recordó que “a todo el mundo le consta, quisimos venderlo desde el principio, hice este compromiso en la campaña. Hemos vendido como unos 10 aviones, no fue nada más este, sí creo que cerca de 10”.
Recordó que con los recursos de la venta del avión se van a construir hospitales en Tlapa, Guerrero y Tuxtepec, Oaxaca, cada uno con 80 camas y atención con especialidades, los cuales se van a entregar antes de septiembre de 2024.
Por tanto, aseguró que la mayoría de la población está contenta con esta acción del gobierno.
“Entonces ya salimos de éste pendiente que teníamos, desde luego hay algunos que no les gusta pero la mayoría de la gente está contenta porque, además, es algo que no se debe repetir.
“Ojalá y esto nunca jamás vuelva a pasar porque era lo que predominaba, la fantochería, la prepotencia, usaban helicópteros también modernos, me acuerdo que compraron seis aviones, no como este, jets, pequeños en el gobierno anterior y seis helicópteros y usaban los helicópteros hasta para ir a jugar golf, entonces todo eso ya se terminó”, concluyó.
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