Al referirse por segunda ocasión al posicionamiento del ex fiscal de Estados Unidos, Bill Barr, quien afirmó en un artículo publicado en Wall Street Journal que el sexenio de Felipe Calderón fue el único que ha enfrentado al narcotráfico en México, el presidente Andrés Manuel López Obrador cuestionó las razones de esta postura en el contexto del juicio contra Genaro García Luna, el brazo derecho de Calderón que protegió al cártel de Sinaloa.
Durante su conferencia se preguntó: “¿no será que como ya está de nuevo en su despacho le va a llevar el caso a Calderón, lo van a contratar de abogado de Calderón o de quienes resulten arriba, aquí y allá responsables, porque puede hablar todavía García Luna?”
Durante la conferencia matutina una reportera preguntó si este episodio (el caso de los cuatro estadounidenses secuestrados) no podría ahondar las propuestas de republicanos como William Barr y otros para que se considere a los cárteles mexicanos como terroristas, a lo cual respondió López Obrador que hay intereses partidistas de Estados Unidos en los temas de seguridad.
El mandatario también criticó la gran cobertura mediática de este episodio, a la que calificó de “amarillista”, y señaló que no se da el mismo seguimiento cuando hay tragedias de mexicanos en Estados Unidos, por ejemplo, el asesinato de dos jornaleros indígenas asesinados y uno herido por un granjero cerca de San Francisco en Estados Unidos que sucedió hace un mes, aproximadamente.
López Obrador dijo que las políticas neoliberales han encumbrado a instancias que en realidad son decadentes, no sólo la prensa internacional, con este tipo de publicaciones del Wall Street Journal, pero también se dio en Universidades o en organismos financieros como Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional en un entorno mundial donde hay muchos desequilibrios sociales.
“Estaba yo leyendo que una persona tiene un yate de 500 millones de dólares, y estaba leyendo que hay un hotel en Dubai donde cuesta cien mil dólares la noche. Puros pecadores sociales, habiendo mil millones de seres humanos que sobreviven con menos de un dólar diario”.
Ranchero que mató a mexicano se declara inocente
Por otra parte, un ranchero de Arizona acusado de matar a un mexicano en sus tierras cerca de la frontera entre Estados Unidos y México se declaró inocente de asesinato y otros cargos.
George Alan Kelly estuvo presente durante su encausamiento en la Corte Superior de Santa Cruz en Nogales, donde se le presentaron cargos de asesinato en segundo grado y ataque con agravantes. El hombre de 74 años habló poco, y sólo respondió “sí” o “no” a preguntas del juez.
El juez Thomas Fink fijó la fecha del juicio para el 6 de septiembre, rechazando la solicitud de la abogada de Kelly de aplazar el juicio dos meses. Brenna Larkin había pedido más tiempo para entrevistar a sus expertos y porque el estado ejecutó el lunes una orden de allanamiento adicional en la propiedad de Kelly.
Kelly salió de la sala inmediatamente después de la audiencia. Se le ha permitido permanecer en libertad con una fianza de un millón de dólares.
La Fiscalía redujo el cargo de Kelly, quien en un principio había sido acusado de asesinato en primer grado, lo que habría requerido demostrar una intención premeditada de matar a alguien y que pudo derivar en una sentencia de muerte. Las autoridades mexicanas han dicho a la Fiscalía federal que creen que Kelly debió enfrentar un cargo de asesinato en primer grado.
Kelly está acusado de matar a tiros a Gabriel Cuen Buitimea, un migrante de 48 años oriundo de Nogales, México, que se encontraba desarmado.
Los fiscales han dicho que Kelly no tenía fundamentos para disparar intencional o imprudentemente su fusil AK-47 contra los aproximadamente ocho migrantes desarmados que se encontraban a unos 75 o 90 metros (80 o 100 yardas) de distancia.
Larkin dijo que su cliente disparó al aire. Ha señalado que Kelly temía por su seguridad y la de su esposa, además de su propiedad, y que había visto a personas armadas con fusiles y mochilas atravesando por sus terrenos.
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