Reitera AMLO compromiso de búsqueda de los 43 de Ayotzinapa – El Presidente Andrés Manuel López Obrador sostiene una reunión con los familiares de los 43 estudiantes normalistas desaparecidos el 26 y 27 de septiembre de 2014.
El encuentro, puntualizó el mandatario en su conferencia matutina, es para reafirmar el compromiso de su Gobierno en buscar a los jóvenes y determinar a los culpables de la desaparición de los jóvenes.
“Vamos a reunirnos hoy para volver a manifestar nuestra decisión, voluntad de seguir buscando a los jóvenes hasta encontrarlos; no vamos a descansar en eso, es una prioridad”, destacó.
Se espera que alrededor de las 14:00 horas los familiares de los estudiantes desaparecidos fijen una postura sobre la reunión con el Presidente López Obrador.
Los familiares ingresaron a Palacio Nacional alrededor de las 9:00 horas, luego que manifestantes de la Central de Abastos retiraran uno de los bloqueos que mantienen sobre las puertas de acceso al recinto histórico.
Según información de medios nacionales, López Obrador se habría sumado a la reunión a las 10:25 horas; momentos antes lo habrían hecho la Secretaria de Gobernación (Segob), Olga Sánchez Cordero, y el Subsecretario de Derechos Humanos y Migración de la Segob, Alejandro Encinas.
Ayer, representantes de los familiares anunciaron que durante el encuentro cuestionarían al mandatario por la liberación de 44 presuntos responsables de la desaparición de los jóvenes, entre ellos el sujeto identificado como Gildardo López Astudillo, “El Gil”.
El próximo 26 y 27 de septiembre se cumplirán cinco años de la desaparición de los jóvenes, luego que fueran atacados por sujetos armados sobre las calles del municipio de Iguala, Guerrero.
Fotos de tortura con personas que sufrieron graves heridas en la piel o se les amputaron las extremidades, evidencias de ejecutados, hombres y mujeres, el retrato de una mujer acompañada de un par de niños, interrogatorios, armas y reportes de medios de comunicación sobre Guerreros Unidos, son algunas de las cosas que las autoridades encontraron en los celulares de integrantes del cártel.
En el dispositivo también se encontraron imágenes, obtenidas por el diario Milenio, de distintos vehículos quemados y zonas acordonadas para peritajes forenses, saldo de enfrentamientos con otros cárteles como Los Rojos o La Familia Michoacana, con los que disputaban plazas en la llamada Tierra Caliente de Guerrero.
Gildardo López Astudillo, alias “El Cabo Gil”, que controlaba desde su celular la actividad criminal de la zona, dando órdenes a sicarios y halcones, recuperó su libertad el 2 de septiembre pasado.
Pese a las pruebas en su contra de los crímenes que cometió u ordenó a sus subalternos este líder del cártel Guerreros Unidos, implicado en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, hoy está libre.
El pasado 30 de agosto un juez de Tamaulipas lo absolvió del delito de privación ilegal de la libertad en la modalidad de secuestro, del cual fue acusado en perjuicio de los 43.
El juez consideró que las pruebas en su contra fueron obtenidas de manera ilegal por la entonces PGR, con lo que pudo salir caminando de la prisión de máxima seguridad del Altiplano en el Estado de México, donde se encontraba recluido junto a otros destacados personajes del narcotráfico.
En algunas de las conversaciones encontradas en el dispositivo, a las que Milenio pudo tener acceso, se detalla el intercambio que presuntamente “El Cabo Gil” habría tenido con un contacto identificado únicamente como “Tintán”.
En un fragmento de dicha plática realizada a la medianoche del 5 de octubre de 2014, apenas una semana después de la desaparición de los 43, Gildardo López pide el número personal al contacto con el que conversa de manera fraterna.
“El Gil”, ligado al caso Iguala, es absuelto con 3 más; abandona penal del Altiplano. Más adelante le envía a Tintán el extracto de una nota periodística en la que se menciona el hallazgo de fosas clandestinas en la comunidad de Pueblo Viejo, a unos 40 kilómetros de Iguala, donde se encontraron restos humanos presuntamente de los normalistas.
Después le pregunta su opinión al respecto con un “Como ves este pedo”.
De acuerdo con fuentes federales, antes de su detención, “El Cabo Gil” era uno de las principales cabecillas del cártel de Guerreros Unidos, que es una escisión del cártel de los Beltrán Leyva, conformada tras su declive con el abatimiento o arresto de sus principales jefes.
En la organización se encargaba de liderar a todos los comandantes y sicarios. En la estructura de la organización delictiva estaban encima de él únicamente los hermanos Casarrubias, Sidronio “El Chino” y Mario “El Sapo Guapo”. Ambos detenidos por sus implicaciones en el caso Ayotzinapa.
Sidronio también fue liberado recientemente.
En las declaraciones de algunos de sus subalternos se constata cómo la operación del grupo se apoyaba en el uso de servicios de mensajería instalados en sus teléfonos celulares. “Nunca los van a encontrar, los hicimos polvo y los tiramos al agua”, es tal vez el mensaje más emblemático escrito por Gildardo López Astudillo, de acuerdo con la inteligencia mexicana.
De acuerdo con la declaración de Sidronio Casarrubias, “El Gil” se lo envió refiriéndose a un grupo de normalistas a quienes señalaron hace cinco años de ser integrantes de Los Rojos.
Supuestamente la cúpula de Guerreros Unidos concluyó que ese 27 de septiembre, había infiltrados en el “contingente levantado” en Iguala, los asesinaron a todos sin distinción, para proteger la plaza que seis meses antes habían recuperado a balazos.
Con información de Notimex y Milenio
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