El presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que mantiene una relación respetuosa con el gobierno de Argentina, sobre la base del diálogo, pero, a pregunta expresa, dijo que en la etapa final de su gobierno no tiene pensado viajar al extranjero (salvo que se realice la cumbre de líderes de América del Norte a Canadá) ni invitar a mandatarios de otros países a visitar a México.
Señaló que en general las relaciones de México con los países en el mundo son buenas, aunque reconoció que el caso de Perú es una excepción porque nuestro país no reconoce la destitución del ex presidente Pedro Castillo, porque se trató de un golpe de Estado, que ahora se les llama golpe blando, al ser destituido por el Congreso peruano: son públicas nuestras diferencias, aunque hay respeto por el pueblo peruano.
A lo mejor hay alguna excepción en la invitación a mandatarios extranjeros, pero, comentó, “no tengo pensado invitar a Javier Milei (presidente de Argentina) ni a ningún otro. Siempre con respeto a sus pueblos, porque, aunque tengamos posturas distintas, como es obvio, fue electo por los argentinos y respetamos al pueblo argentino que lo eligió”.
Presentan estrategia mexicana de movilidad humana
Por su parte, la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Alicia Bárcena, informó las características y propuestas de la Estrategia Mexicana de Movilidad Humana, que busca atender a los mexicanos en el exterior, así como a las personas extranjeras que migran en México.
Alicia Bárcena informó que México es un país que “es un modelo único porque México es uno de los pocos países que enfrenta todas las fases del ciclo migratorio, somos un país de origen, de tránsito, de destino y de retorno”, por lo que la Estrategia Mexicana de Movilidad Humana se basa en dos pilares: atender a los mexicanos en el exterior, y brindar atención a los extranjeros y extranjeras migrantes en México.
El objetivo de la “Estrategia Mexicana de Movilidad Humana” busca abordar la migración con una mirada regional – hemisférica atendiendo las causas estructurales de la migración: pobreza, desigualdad, violencia, cambio climático, y además priorizar a las comunidades mexicanas en el exterior.
La atención a comunidades mexicanas en el exterior promueve la cooperación para el bienestar en comunidades de origen con acciones coordinadas para la gestión humanitaria de flujos migratorios irregulares, el diálogo político de alto nivel para impulsar la regularización de mexicanos en el exterior, facilitación del diálogo sobre factores políticos externos y medidas coercitivas unilaterales, y la ampliación de vías seguras, ordenadas y regulares de movilidad humana.
Alicia Bárcena también destacó la atención a las causas estructurales de la migración, la cual se basa en los programas sociales Jóvenes Construyendo el Futuro y Sembrando Vida. A través de estos dos programas, México contribuye con 2 mil 18 millones de pesos, con los que se apoya a 86 mil beneficiarias y beneficiarios en Belice, Cuba, Colombia, Ecuador, Venezuela, El Salvador, Haití, Honduras y Panamá. Además, se está impulsando un diálogo con Estados Unidos para que aporte 20 mil millones de dólares anuales en América Latina y el Caribe para atender las causas de la migración.
En cuanto a las comunidades mexicanas en el exterior, Alicia Bárcena informó que hay 37.3 millones de mexicanos que viven en Estados Unidos, de los cuales 26.7 son mexicanos de segunda y tercera generación, 10.6 millones son nacidos en México y 5.3 son indocumentados, aproximadamente.
Bárcena explicó que la comunidad mexicana en Estados Unidos está concentrada en dos entidades, California (36%) y Texas (22%), y que México cuenta con una red de 53 consulados en Estados Unidos que tienen la misión de proteger los derechos de las y los mexicanos, y constituyen la red consular más amplia del mundo de un país en otro.
Los desafíos que enfrentan los mexicanos en Estados Unidos son la regularización migratoria, la discriminación, xenofobia y temor a denunciar delitos; la politización de su integración; el acceso limitado a servicios de salud, educación, financieros y económicos; las barreras lingüísticas; los empleos mal remunerados y precarios; la separación familiar por las políticas migratorias restrictivas, y el riesgo de deportación que vulnera su capacidad para integrarse plenamente.
Las y los mexicanos en Estados Unidos contribuyen con 342.8 mil millones de dólares en impuestos, lo que representa más que el Producto Interno Bruto (PIB) de Colombia (314.5 millones de dólares), además siete de cada diez trabajadores agrícolas son de origen mexicano, se gastan 265 mil millones de dólares y envían 63.3 mil millones de dólares de remesas a México.
Alicia Bárcena presentó los 10 puntos propuestos al Gobierno de Estados Unidos por el presidente López Obrador en materia de migración:
1) Regularización de los mexicanos que llevan más de 5 años viviendo y trabajando en Estados Unidos.
2) Que Estados Unidos ponga 20 mil millones de dólares anuales para apoyar a los países pobres de América Latina y del Caribe.
3) Suspender las sanciones a Venezuela para aminorar los flujos migratorios.
4) Levantar el bloqueo a Cuba que obstaculiza su desarrollo.
5) Ampliar vías regulares de movilidad laboral y expandir el programa actual de recepción de migrantes por vías legales.
6) No construir muros ni cerrar la frontera.
7) Combatir el narcotráfico y el consumo de drogas como el fentanilo.
8) Regular la venta y exportación de armas de Estados Unidos a México.
9) Elaborar un plan conjunto de desarrollo que impulse la industrialización y el comercio en el marco del T-MEC para continuar fortaleciendo a América del Norte como región en el mundo, y definir una estrategia para la integración económica con todo el continente.
10) Reafirmar el compromiso de mantener relaciones de cooperación, amistad y respeto a nuestras soberanías.
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