No se pueden estimar con exactitud, pero las pérdidas que ha dejado el recale de sargazo, de tres años a la fecha, son millonarias y el problema es serio.
Pese a ello, “nos estamos preparando para enfrentar esta contingencia, nos tenemos que adaptar a los cambios de la naturaleza”.
Así lo señaló el presidente de la Asociación de Prestadores de Servicios de Turismo Náutico en la Riviera Maya, Miguel Ángel Ramírez Lara, quien informó que pese a que este fenómeno de la naturaleza viene golpeando desde hace tres años las costas de Quintana Roo, el turismo no termina de acostumbrarse a su presencia.
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“No podemos precisar el monto de las afectaciones, pero son millonarias, es un problema serio que nos viene golpeando, pero no podemos hacer otra cosa que prepararnos para afrontar esta contingencia”, explicó.
Lamentó que en las reuniones que sostienen las autoridades y especialistas, no convoquen a los verdaderos conocedores del Caribe Mexicano, los náuticos y pescadores, quienes conocen el comportamiento de estas aguas por años de experiencia.
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