En muchas ocasiones las inquietudes respecto al sexo aturden mucho la vida del ser humano y es muy probable que en algún momento te hayas preguntado qué pasa cuando dejamos de tener relaciones íntimas por un cierto periodo.
Existen ciertas cosas que pueden determinar lo que ocurre, no solo contigo mismo de manera interna; sino también con tu cuerpo y las reacciones que esta acción pueda traer como consecuencia, pues en su mayoría suelen ser contraproducentes, especialmente cuando se lleva una vida sexual activa.
Aunque esto suele extenderse, hay 5 razones principales por las que no debemos dar ese cambio tan brusco y rápido. Esto no significa que solo afecte a hombres o a mujeres específicamente, daña a ambos de diferentes formas.
¿Qué pasa cuándo dejamos de tener relaciones íntimas?
- Disfunción eréctil
A los hombres: Una de las consecuencias principales en el sexo masculino; es sufrir de disfunción eréctil; aunque es lo más común, esta podría ser una de las razones por las que el hombre no debería de dejar las relaciones íntimas por un tiempo muy extendido; tampoco es para estar en actividad 24/7, porque todo en exceso también suele dañar.
¿Por qué? Cuando el órgano pierde la actividad ‘constante’ o normal que se mantiene en la vida de un ser humano, comienza a atrofiarse, y la disfunción eréctil es un claro síntoma de ello.
Beneficios: La eyaculación es benéfica para todo hombre en cuanto a su salud; incluso algunos estudios han destacado que en muchas ocasiones ayuda a reducir el cáncer de próstata.
- Aumenta el estrés
Ambos sexos: Cuando se mantienen relaciones íntimas, diversas hormonas logran desprenderse de nuestro cuerpo; endorfina, serotonina, oxitocina y dopamina al sentir felicidad; dopamina y epinefrina cuando sentimos amor; y dopamina combinada con serotonina al sentir placer o excitación y aunque pareciera incierto, es verdad que el dejar de tener relaciones íntimas no quita aumenta la presión arterial, pero sí ayuda a que ésta disminuya constantemente; debido a la expulsión de dichas hormonas.
¿Por qué? La presión arterial se asemeja al estrés que se acumula en el cuerpo; este puede variar en diversos días, dependiendo del estado de ánimo en el que el ser humano se encuentre, ya sea por los factores laborales, del hogar o con el simple pensamiento.
Beneficios: El sexo, se convierte en el mejor aliado para liberar todas aquellas cargas que puedan presentarse como consecuencia de un día malo.
- Un sistema inmunológico vulnerable
Ambos sexos: De acuerdo a un estudio realizado por la Universidad Bloomington de Indiana, mantener relaciones íntimas ayuda a que el sistema inmunológico se mantenga muy bien protegido e incluso reforzado.
¿Por qué? Cuando esto disminuye, el cuerpo emite una alerta en la que manifiesta no tener el mínimo fortalecimiento de este sistema, por lo que sabes perfectamente lo que en realidad se necesita.
Beneficios: Se puede hacer una prueba, las defensas disminuyen cuando la actividad sexual está pausada por algún tiempo.
- Problemas con el corazón
Ambos sexos: No solo el sistema inmunológico es el único en peligro, órganos más importantes como el corazón también podría ser alguno de sufra las consecuencias de un descanso en las relaciones íntimas.
¿Por qué? Básicamente el sexo es un ejercicio aeróbico, mismo que no solo a una mejor circulación, sino también a la presión arterial; misma que suele liberarse, cuando esto se lleva a la práctica.
Beneficios: En caso de no practicar algún otro ejercicio, este podría ser el mejor entre pareja; pues la ayuda sería mutua.
- El intelecto se vuelve lento
Ambos sexos: La Universidad de Maryland y la Universidad de Corea del Sur, han destacado que el sexo ayuda a mejorar el funcionamiento del cerebro y ha fomentar el crecimiento de las células. Aunque, cabe aclarar que el dejar de tener relaciones íntimas no es sinónimo de pérdida en el intelecto, pues éste tiene diversas formas de estimulación.
Fuente: GQ
