La ilusión de todo niño desde que inicia su razonamiento es la llegada de papá Noel, quien año con año visita los hogares de los pequeños que se portaron muy bien a lo largo del año, para entregarles el regalo que pidieron; pero, ¿cómo le dices que Santa Claus no existe cuando crece?
La solicitud se hace con una cartita que va en el árbol de navidad o bien en la bota o zapato, se deja la noche del 24 de diciembre para que el 25 los niños corran al amanecer en busca de lo que tanto anhelan.
Con el paso del tiempo, cerca de haberse cumplido los 6 años las dudas comienzan a surgir respecto a dónde vive Santa, cómo llega, cuántos lugares recorre, por qué solo viene en diciembre, qué come; entre muchas otras.
Consejos para decirle a tu hijo que Santa Claus no existe
- No decírselo en Navidad, ni el 6 de enero
- Explicar de inicio a fin, partiendo del lado sensible
- Decirle qué significan en realidad los regalos navideños y cómo surge la magia
- Hablarlo con tus propias palabras
- Sé ingenioso para contarle la verdad, evita su rechazo
Entre los 6 y 8 años es cuando ya han madurado lo suficiente como para comprender que Santa Claus no existe y los Reyes Magos no son reales o al menos no lo son como personas físicas de carne y hueso que aparecen de repente en su casa. La capacidad de razonamiento abstracto se desarrolla en la etapa entre los 8 y 14 años.
Con estos datos, normalmente la edad para que sepan la realidad es entorno a los 8 y 11 años. Actualmente es muy poco probable que un niño con 11 años todavía crea en ellos. Así que, si tu hijo llega a los 10 años y aún te pregunta por alguna de estas figuras, es prudente que te sientes junto a él para explicarle la historia verdadera.
Te compartimos el formato de una carta para decirle a tu hijo que santa no existe; es sutil y tú puedes argumentarla con los mejores datos, según sea tu caso.
Hola, (nombre del menor).
Somos los Reyes Magos. Seguro que ya nos conoces de habernos enviado muchas cartas por estas fechas pidiéndonos regalos. Esperamos que este año también te hayas portado bien, portarse bien es la mejor manera para recibir cosas a cambio.
Queríamos decirte una cosa. Lo importante no es que seamos Reyes o Magos. Lo importante es que quien te envía los regalos son unas personas que te quieren mucho, que saben como te sientes y lo que te mereces cada uno de los regalos.
El secreto es el siguiente. Los Reyes Magos solo somos los representantes fantásticos de lo mucho que te quieren tu papá, tu mamá, tus abuelos, tus tíos y toda la gente que te rodea y quiere un montón. Somos con los personajes de cuento pero que no existimos en la realidad, solo en la fantasía, la ilusión y los corazones de todos los que te quieren.
Ahora ya lo sabes, los Reyes Magos no existimos como personas, las personas que ponen los juguetes por la noche mientras tú duermes son… ¡tus papás! Tus padres son los que representan a los Reyes Magos, como si de actores se trataran.