Una conocida influencer española identificada como Marta Hermoso fue arrestada junto a otras tres personas en el marco de una investigación por un presunto robo de 400.000 euros cometido contra un empresario mexicano en Madrid.
La detención tuvo lugar el pasado 28 de septiembre, según han confirmado fuentes de la Policía Nacional a la agencia Europa Press. La operación policial, que ya ha derivado en diligencias judiciales, se centra en un incidente ocurrido en el hotel Wellington, un establecimiento de alto nivel ubicado en el exclusivo barrio de Salamanca, en Madrid.
De acuerdo con la información publicada por el diario El Mundo, Marta Hermoso, de 35 años, figura entre las personas detenidas por su supuesta implicación en el delito que implica casi nueve millones de pesos al tipo de cambio actual, como una de las principales sospechosas.
Tras rendir su primera declaración ante la autoridad judicial española, los cuatro arrestados fueron puestos en libertad condicional, aunque continúan imputados por un posible delito de «robo con fuerza», lo que en México se denomina robo con violencia.
Te Puede Interesar: El Vaticano inicia el proceso de Sede Vacante tras la muerte del papa Francisco
Uno de los elementos clave en esta investigación son las imágenes de las cámaras de videovigilancia del hotel, que habrían captado a los implicados en el momento del supuesto robo. No obstante, la defensa de Marta Hermoso cuestiona de forma tajante dichas grabaciones, alegando que existe una equivocación en la identificación de su clienta.
Juango Ospina, abogado defensor de Hermoso y miembro del prestigiado despacho legal Ospina Abogados, ha expresado su total confianza en demostrar la inocencia de la influencer.
En declaraciones recogidas por Europa Press, el letrado afirmó: «Hay un error de identificación de las mujeres que estuvieron en el lugar de los hechos el día del robo, y nuestra cliente no estuvo. No se descartan diferentes líneas de investigación, pero de momento hay que ser prudentes y que trabaje la justicia».
Además, Ospina asegura que su representada no tiene ningún vínculo con las otras tres personas involucradas en el caso y sostiene que este aspecto podrá ser probado.
«Mi clienta niega tener ninguna participación con los hechos y afirma que no conoce a ninguna de las tres personas que aparentemente participaron en el robo», indicó el abogado, añadiendo que «este extremo se demostrará, iniciando acciones legales por posible delito de falso testimonio o estafa procesal».
Por ahora, el caso sigue bajo investigación judicial, y mientras la policía española continúa con la recopilación de pruebas, la defensa insiste en que se trata de una confusión que deberá aclararse en el proceso legal.
Con Información de Agencias
