Un perro policía de la Unidad K9 de Santa Fe, Nuevo México en Estados Unidos, esta siendo sometido a una investigación acusado de morder excesivamente. La noticia ha causado revuelo debido al aprecio que se tiene por estos elementos policiales de cuatro patas.
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Las expectativas eran altas cuando Ayke, apenas un cachorro, se unió al programa K-9 del Departamento de Policía de Santa Fe. Cuatro años después, sin embargo, el pastor alemán se encuentra en el centro de una investigación por comportamiento indebido.
Ayke ha mordido a más personas que cualquier otro perro en la unidad K-9 del departamento, y ahora es el foco de una investigación interna tras un ataque a uno de los agentes del departamento en marzo pasado.
Según informes del periódico Santa Fe New Mexican, la ciudad enfrenta además una demanda interpuesta por un agente que necesitó cirugía plástica después de ser atacado durante un ejercicio de entrenamiento en 2022.
El jefe de policía, Paul Joye, ha declinado hacer comentarios sobre el tema, mientras que la investigación sobre el último incidente relacionado con Ayke, uno de los cuatro perros del departamento, sigue en curso.
Aunque la policía de Santa Fe defiende la utilidad de las unidades K-9 para detectar drogas o materiales explosivos, así como para detener a sospechosos, varios estados están considerando propuestas legislativas este año que impondrían penas más severas por dañar o matar a perros policía.
Sin embargo, en los últimos años se han reportado lesiones causadas por estos animales en varios estados, lo que ha generado preocupación y debate sobre su uso.
A pesar de las críticas, Ayke continúa en servicio en Santa Fe. Según el subjefe de policía Ben Valdez, el departamento confía en que el perro no represente un peligro para el público.
En cuanto al costo asociado con estos animales, Valdez explicó que el departamento pagó alrededor de 4 mil 400 dólares por cada perro y otros 2 mil 200 dólares por su certificación inicial. Además, el departamento gasta miles de dólares al año en comida y atención veterinaria para los perros.
El riguroso entrenamiento y las políticas de supervisión del departamento buscan garantizar la seguridad y el buen uso de los perros policía, aunque los incidentes como el protagonizado por Ayke plantean interrogantes sobre su eficacia y seguridad para la comunidad.
Con Información de Agencias
Cuando era un cachorro, había grandes esperanzas de que Ayke ayudara a revivir el programa K-9 del Departamento de Policía de Santa Fe. Ahora, cuatro años después, el pastor alemán se encuentra bajo investigación por mala conducta.
Ayke ha mordido a más personas que cualquier otro perro de la unidad K-9 del departamento, y es objeto de una investigación de asuntos internos por un ataque en marzo a uno de los propios agentes del departamento.
La ciudad también se está defendiendo de una demanda presentada por un agente que tuvo que someterse a una cirugía plástica tras ser atacado durante un ejercicio de entrenamiento en 2022, informó el periódico Santa Fe New Mexican.
Esta entrada fue modificada por última vez en viernes, 12 de julio, 2024
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