La NASA ha dado a conocer que la luna está encogiendo y eso podría generar varias cicatrices visibles en la superficie. Y es que especialistas han dado a conocer que el satélite de la Tierra se va achicando a medida que su interior se enfría y se vuelve más delgado. Y es que como ejemplo, los científicos aseguran que al igual que una uva se arruga cuando se reduce a una pasa, la Luna se arruga al encogerse. Pero, a diferencia de la piel flexible de una uva, la corteza superficial de la Luna es frágil, por lo que se rompe a medida que la Luna se encoge. Y es que según la NASA, esta investigación fue posible gracias a la creación de un algoritmo que procesó datos sísmicos tomados en los años sesenta y setenta. Sin embargo, una nueva evidencia que se hizo en el año 2009, señaló que la luna se ha comprimido cerca de 150 pies (aproximadamente 50 metros) durante los últimos cientos de millones de años, poco tiempo considerando el satélite de la Tierra tiene 4,53 miles de millones años de edad. "Nuestro análisis nos proporciona la primera evidencia de que estas fallas aún están activas y probablemente producen terremotos lunares a medida que la Luna continúa enfriándose y disminuyendo gradualmente", reportó Thomas Watters, el científico principal del Centro para Estudios Planetarios y de la Tierra en el Centro Nacional de Aire y Espacio del Museo Smithsonian en Washington. Inclusive, los análisis indica que algunos de los terremotos pueden ser bastante fuertes, llegan a tener una magnitud de cinco en la escala de Richter. La Luna no es el único "mundo" en nuestro sistema solar que experimenta cierta contracción con la edad. Mercurio tiene enormes fallas de empuje, de hasta 1.000 kilómetros de largo y más de 3 kilómetros de altura, que son significativamente más grandes en relación con su tamaño que las de la Luna, lo que indica que se redujo mucho más que esta. Dado que los planetas rocosos se expanden cuando se calientan y se contraen a medida que se enfrían, las grandes fallas de Mercurio revelan que es probable que haya suficiente calor como para ser completamente liquido después de su formación. Los científicos que intentan reconstruir el origen de la Luna se preguntan si lo mismo le sucedió a la Luna o si, en cambio, sólo era parcialmente líquida, quizás con un océano de magma en su interior profundo. El tamaño relativamente pequeño de las cicatrices lunares están en línea con la contracción más sutil que se espera de un escenario en el que la luna fuese solo parcialmente líquida.
La NASA ha dado a conocer que la luna está encogiendo y eso podría generar varias cicatrices visibles en la superficie.
Y es que especialistas han dado a conocer que el satélite de la Tierra se va achicando a medida que su interior se enfría y se vuelve más delgado.
Y es que como ejemplo, los científicos aseguran que al igual que una uva se arruga cuando se reduce a una pasa, la Luna se arruga al encogerse. Pero, a diferencia de la piel flexible de una uva, la corteza superficial de la Luna es frágil, por lo que se rompe a medida que la Luna se encoge.
Y es que según la NASA, esta investigación fue posible gracias a la creación de un algoritmo que procesó datos sísmicos tomados en los años sesenta y setenta.
Sin embargo, una nueva evidencia que se hizo en el año 2009, señaló que la luna se ha comprimido cerca de 150 pies (aproximadamente 50 metros) durante los últimos cientos de millones de años, poco tiempo considerando el satélite de la Tierra tiene 4,53 miles de millones años de edad.
De acuerdo a un estudio de la NASA, la luna ha empezado a encogerse
«Nuestro análisis nos proporciona la primera evidencia de que estas fallas aún están activas y probablemente producen terremotos lunares a medida que la Luna continúa enfriándose y disminuyendo gradualmente», reportó Thomas Watters, el científico principal del Centro para Estudios Planetarios y de la Tierra en el Centro Nacional de Aire y Espacio del Museo Smithsonian en Washington.
Inclusive, los análisis indica que algunos de los terremotos pueden ser bastante fuertes, llegan a tener una magnitud de cinco en la escala de Richter.
La Luna no es el único «mundo» en nuestro sistema solar que experimenta cierta contracción con la edad. Mercurio tiene enormes fallas de empuje, de hasta 1.000 kilómetros de largo y más de 3 kilómetros de altura, que son significativamente más grandes en relación con su tamaño que las de la Luna, lo que indica que se redujo mucho más que esta.
Dado que los planetas rocosos se expanden cuando se calientan y se contraen a medida que se enfrían, las grandes fallas de Mercurio revelan que es probable que haya suficiente calor como para ser completamente liquido después de su formación.
La luna está sufriendo algunas transformaciones
Los científicos que intentan reconstruir el origen de la Luna se preguntan si lo mismo le sucedió a la Luna o si, en cambio, sólo era parcialmente líquida, quizás con un océano de magma en su interior profundo.
El tamaño relativamente pequeño de las cicatrices lunares están en línea con la contracción más sutil que se espera de un escenario en el que la luna fuese solo parcialmente líquida.
Fuente: Infobae
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