A pesar de que en Yucatán se decretó la ley seca, habitantes de Dziszantún y Dzilam González, denunciaron la venta ilegal de aguas locas, luego de que en Acanceh varias personas fallecieron debido al consumo de alcohol adulterado.
Los habitantes de ambos municipios, señalaron que temen que mucha gente haga inventos mezclando alcohol barato con otras sustancias, por lo que seguirán denunciando la venta clandestina de alcohol ante la ley seca que se vive en todo el estado yucateco.
Los pobladores hicieron mención de que en Dzilam y Dzidzantún, hay personas que se dedican a la venta de aguas locas y tepache mezclado con alcohol etílico, por lo que temen que cause alguna intoxicación a sus compradores.
Por eso piden a las autoridades municipales crear un plan para erradicar este problema, antes de que surjan más tragedias.
Con información de Megamedia.
Esta web usa cookies.