Familiares de una persona fallecida por complicaciones respiratorias en Izamal, vivieron tensión e inconformidad, ya que querían velar a la fuerza a su pariente.
Los ciudadanos pretendían velar a su pariente en su casa por 24 horas como es la costumbre, sin embargo, debido a la situación de emergencia sanitaria por el Covid-19, la funeraria que llevó el cadáver de la clínica rural No.62 de Izamal a Kimbilá, se fue directamente al panteón de la localidad para la inhumación, lo que generó la inconformidad de los deudos que se negaban a acatar las disposiciones de la autoridad en materia de salud.
De acuerdo con el diagnóstico médico del responsable del consultorio 24/7, había dicho que la persona fallecida, probablemente se había contagiado de Covid-19, por lo que fue trasladada a la unidad de medicina rural No.62 de Izamal, donde fue su deceso.
Finalmente, después de tres horas de estar con el cadáver en el panteón de Kimbilá y espera de una decisión, así como de los documentos necesarios, se llevó a cabo la sepultura del cuerpo.
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Con información de Novedades de Yucatán.
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