Un sujeto en la super manzana (SM) 98 de Cancún, tuvo perdón de Dios, pero no de los encolerizados feligreses que los sorprendieron robando la cableria de cobre de la iglesia de este lugar, y tras someterlo a golpes, lo amarraron para entregarlo a la policía.
Uno de los vecinos alertó a los demás feligreses, quienes de inmediato se organizaron para capturar al ladronzuelo sorprendiéndolo con las «manos en la masa», por lo cual este intentó darse a la fuga corriendo.
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Para su mala fortuna, nop logró llegar muy lejos, ya que los vecinos lograron darle alcance apenas metros adelante, procediendo a darle unas lecciones de «honestidad cristiana» como si de un Judas cualquiera se tratara.
En un sesgo irónico para el infortunado ladrón de propiedades clericales, sus captores lo amarraron con los propios cables que pretendía robar, para luego solicitar la presencia de las autoridades a través del numero de emergencias 911.
A su llegada al lugar, los uniformados de la Policía Quintana Roo, encontraron al presunto ladrón maniatado y tirado en el pasto del camellón central de esta super manzana, donde después de ser acusado por los vecinos, fue subido a la patrulla.
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